El proyecto del Ministerio de Interior por el que las fotografías del documento de identidad recaen en las dependencias policiales pone en jaque la viabilidad de cientos de negocios que "no entienden" la decisión de excluir a los fotógrafos profesionales del servicio. "Es como si en una panadería les prohibieran vender pan", sentencia Andrés Montón, al frente de Foto Indautxu, con más de 70 años de historia y uno de los negocios más próximos a la comisaría de Bilbao. "Nos van a quitar la mitad de las ventas o más, al final, el día a día lo haces con las fotos de carnet y el ahorro que supone para el ciudadano es mínimo, ni 6 euros en diez años".
Jorge Ladrero, al frente de Ladrero Fotógrafos y miembro de la Asociación de Fotógrafos de Bizkaia, ve cómo cada año "va mermando el sector". "La pandemia ha impedido la celebración de bodas, comuniones y eventos que los fotógrafos no hemos podido aprovechar, esta decisión a muchos nos está condenando, no es un servicio que se pueda suplir", explica. En su caso, regenta dos locales, uno de ellos próximo a la comisaría de Bilbao en el que la foto para el DNI copa casi el 100% del negocio.
La Federación española de profesionales de la fotografía y la imagen- representante, entre otras, de la asociación vizcaína- calcula que las fotografías destinadas al DNI suponen para las tiendas del sector el 25% de su facturación, pero el 30 % del beneficio. En las tiendas de barrio ese porcentaje sube a más del 50%, hasta llegar al 90% en el caso de las que se encuentran al lado de las comisarías.
Datos que contrastan con los del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, quien aseguró el pasado miércoles en el Congreso de los Diputados que tan solo el 10% de los 90 millones facturados de media al año por el sector se correspondían a fotografías del DNI. "Aun no suponiendo un gran porcentaje en las ventas, el carnet es un motivo por el cual el ciudadano visita las tiendas de fotografía, si se elimina también un problema para proveedores, fabricantes de papel, equipos, también se verán afectados", explica José Luis Pozo, presidente de la Federación.
Plan de colaboración
"Aunque desconozco el porcentaje exacto, el País Vasco es una de las comunidades que tiene más número de fotógrafos", detalla: "Es lamentable -añade- que esto se permita cuando más ayuda necesita el sector, y un paso en esa dirección sería recuperar las fotos del carnet de conducir, a la vista está que la calidad ha bajado, hay fotos que se realizan por una web cam por personas que no están cualificadas".
En este sentido, la Federación solicita seguir el ejemplo de otros países europeos como Francia, donde el Gobierno y el sector han colaborado para desarrollar sistemas seguros que cumplen con los protocolos europeos, para continuar realizando las fotografías.
"Estamos de sobra capacitados", señala Gaizka Medina de Foto Rodolfo: "Estamos armados tecnológicamente -explica- no nos tenemos que poner al día, lo único que falta es que la policía comparta el software con profesionales autorizados para que las fotogradías puedan subirse a plataformas de seguridad, hacemos la foto en la tienda y en cinco minutos la tienen".
De hecho, el sindicato Profesional de la Policía (SPP) ya defendió, tras el anuncio que los ciudadanos puedan llevar fotografías digitalizadas hechas por profesionales para el futuro DNI 4.0. "Para los administrativos va a suponer un cuello de botella, son problemas para el fotógrafo y para la policía, muchas veces recibimos niños pequeños a los que tienes que dedicarle tiempos, se necesitan ciertos conocimientos y requisitos que la policía desconoce y va a ralentizar mucho los trámites", explica Medina.
Todos coinciden en lo "contradictorio" de que el Gobierno cuente con un presupuesto de 6,5 millones de los fondos de Recuperación, Transformación y Resiliencia para implantar este DNI que se van a destinar "a hundir el sector".