El consejero vasco de Educación, Jokin Bildarratz, ha recordado que "el sistema o la escuela no es nunca suficiente para poder educar en valores, lengua o deporte". Todo esto surge tras otro fin de semana más con macrobotellones, en las capitales vascas. El último, el pasado sábado noche en Bilbao, en el parque de Doña Casilda, donde se reunieron casi un millar de jóvenes. Bildarratz ha advertido que educar en valores es responsabilidad de los padres y madres y que no es suficiente con la escuela: "los jóvenes solo pasan entre un 8 y un 12% de su vida en los centros escolares y los valores no se pueden únicamente transmitir en el ámbito educativo".
"Hay una reflexión a realizar. La educación formal, la que realizamos en el ámbito educativo, y la no formal en la que municipios y diputaciones deben jugar un papel importante para adecuar entre todos las necesidades de los jóvenes. Hay que estructurar el ocio para ser capaces de educar en valores", ha argumentado el consejero.
Desde su y punto de vista, es necesaria una "reflexión a nivel social" y también de cara al "acuerdo escolar" y para ello pide la colaboración de las insituciones. Estos botellones se están conviertiendo en la tónica general de cada fin de semana. Este pasado sábado, los vecinos del parque de Doña Casilda en Bilbao, denunciaron que todos los fines de semana, esa zona se convierte en un "estercolero" y casi no pueden dormir. Los equipos de limpieza necesitaron el domingo más de cinco horas para retirar todos los residuos generados tras el macrobotellón donde se reunieron cientos de jóvenes.
Los mandos de Ertzaintza y Policía Municipal decidieron no intervenir esta fiesta de manera consensuada por el "riesgo que suponía" ya que consideraron que "podía ser peor el remedio que la enfermedad" por el peligro de carreras o avalanchas al tratar de huir del lugar corriendo.
El alcalde de Bilbao, Juan María Aburto, ha afirmado sentir "vergüenza" por las estas "actitudes incívicas" y ha afirmado que "este no es el camino a recorrer juntos para un Bilbao mejor". "¿A eso le llamáis ocio nocturno? A molestar a los vecinos, ensuciar nuestras calles y parques, saltarse el respeto a la autoridad y el necesario respeto a las normas higiénico-sanitarias en tiempos de pandemia...", ha enumerado.