La Fiscalía de la Audiencia Nacional avala siete de los ocho terceros grados concedidos por el Gobierno vasco a presos de ETA tras obtener la transferencia de prisiones. Unicamente ha recurrido la progresión del otorgado al histórico dirigente de ETA José María Arregui Erostarbe, Fiti o Fitipaldi, de 75 años, que fue parte de la llamada "cúpula Artapalo" y cuya condena total asciende a más de mil años de cárcel, 30 de cumplimiento efectivo.
En su recurso ante el Juzgado de Vigilancia Penitenciaria, el fiscal Carlos Bautista se opone a la semilibertad de 'Fiti' porque no ha gozado de permisos previos, los escritos que ha presentado no son suficientes, ni el pago de la responsabilidad civil, según han confirmado a Efe fuentes jurídicas.
Los ocho presos de ETA a los que el Gobierno vasco otorgó el tercer grado después de recibir las competencias en materia penitenciaria son José María Arregi Erostabe, Francisco José Ramada Estévez, José Ángel Lerín Sánchez, Unai Fano Aldasoro, Mikel Arrieta Llopis, Ignacio Crispín Garcés Beitia, Egoitz Coto Etxeandia y Ugaitz Pérez Sorriketa.
Tras conocerse estas progresiones penitenciaria, era Covite quien pedía a la Fiscalía que las revisara al entender que ninguno de los que han accedido al tercer grado "tiene intención de reinsertarse". A juicio de este colectivo de víctimas, se han otorgado a miembros de la banda terrorista "orgullosos de su pasado criminal y que cuentan con todo el apoyo logístico y propagandístico de la izquierda abertzale".
Reapertura del caso sobre el atentado en Santa Pola
La Audiencia Nacional también ha acordado hoy reabrir la investigación sobre el atentado que ETA perpetró en la localidad alicantina de Santa Pola en 2002, en el que murieron un jubilado de 57 años y una niña de 6, para determinar la vinculación de seis exdirigentes de ETA con la acción terrorista.
Según recoge Efe, lo primero que ha hecho es ordenar a la Guardia Civil y a la Policía Nacional que recabe "cuantos datos obren en su poder que permitan relacionar" a los citados exdirigentes de la banda terrorista con el citado atentado, en el que murieron un jubilado de 57 años y una niña de 6, y por el que ya fueron condenados Óscar Celarain y Andoni Otegi.
En paralelo a todo esto, hace apenas unas semanas el mismo magistrado admitía a tramite otra querella de Dignidad y Justicia contra nueve exjefes de ETA por el secuestro y asesinato de Miguel Ángel Blanco. Además, la Audiencia Nacional también se encuentra investigando en estos momentos la presunta responsabilidad de exdirigentes de la banda en el caso de Gregorio Ordóñez.