El homenaje anual al ertzaina Txema Agirre, asesinado en 1997 por un comando de ETA que pretendía atentar contra el Museo Guggenheim Bilbao, ha contado hoy, en el 25 aniversario, con una amplia representación de la Ertzaintza, después de que la Jefatura del cuerpo policial haya decidido instaurar actos individuales de reconocimiento a los agentes caídos en atentados de la banda terrorista.
Maite Mollinedo, viuda de Txema Aguirre, y otros familiares y allegados del ertzaina han participado en el homenaje junto a la directora de la Ertzaintza, Victoria Landa, la directora de Derechos Humanos del Gobierno Vasco, Monika Hernando, mandos de la Policía vasca y compañeros del agente asesinado hace 25 años.
El homenaje, como en anteriores ocasiones, ha consistido en una ofrenda floral ante el monolito que recuerda a Txema Agirre en la plaza situada junto al Guggenheim y bautizada con el nombre del ertzaina.
En años anteriores, el reconocimiento a Txema Agirre era llevado a cabo por sus compañeros y el sindicato de la Ertzaintza Erne.
Agentes de la Ertzaintza. /EFE
La Ertzaintza homenajeaba oficialmente en un acto anual a todos los ertzainas asesinados por ETA, pero desde el pasado 20 de junio la dirección y la jefatura de la Policía vasca han instaurado la organización de actos anuales e individuales de reconocimiento, memoria y homenaje a cada ertzaina asesinado por ETA.
Estos homenajes individuales "se suman y completan al gran acto que organiza todos los años la Ertzaintza, el primer domingo del mes de junio, para recordarles de manera conjunta", ha precisado en una nota el Departamento de Seguridad vasco.
El crimen
Txema Aguirre Larraona, quien contaba con 35 años de edad, custodiaba las inmediaciones del Museo Guggenheim de Bilbao el 13 de octubre de 1997, días antes de su inauguración, cuando observó una furgoneta sospechosa, de la que unos individuos sacaban unas jardineras en las que habían ocultado unos lanzagranadas. Cuando los miembros del comando terrorista se vieron descubiertos, dispararon al agente.
En el lugar donde fue disparado, y donde está situada la placa en su recuerdo, una nutrida representación de mandos y compañeros de Txema Agirre ha asistido este mediodía al homenaje en su memoria.
"No queremos olvidar, ni que se olvide", ha dicho un mando de la Ertzaintza ante las decenas de personas que han asistido al homenaje.
"No queremos más héroes", ha añadido en recuerdo a todos los agentes que "haciendo su trabajo, perdieron la vida".
Un portavoz de la asociación de ertzainas Mila Ezker ha dicho que si hoy el Museo Guggenheim Bilbao constituye un "orgullo" y un icono reconocido en todo el mundo es, en parte, gracias a Txema Agirre, que "lo defendió y protegió hasta la muerte".
Ha explicado que se ha concedido a Txema Agirre la medalla al mérito policial a título póstumo, así como un diploma para reconocer el "sacrificio" del agente "al servicio de la sociedad vasca".
Dos parejas de ertzainas han entregado a la viuda ambos reconocimientos.
Posteriormente, asistentes al acto han ido depositando ramos de flores a los pies del monolito en recuerdo a Agirre -junto al que se había colocado hoy una foto del agente-, tras lo cual se ha guardado un minuto de silencio. Dos hileras de agentes de la ertzaintza han hecho el silencio en posición de saludo.
También ha acudido al homenaje una representación de la Policía Municipal de Bilbao -un agente motorizado de este cuerpo detuvo a uno de los miembros del comando de ETA que mató a Agirre-, junto a la concejala de Seguridad Ciudadana de la capital vizcaína, Amaia Arregi. Entre los congregados se encontraba también el diputado general de Bizkaia, Unai Rementeria.
El secretario general del sindicato de la Ertzaintza Erne, Sergio Gómez de Segura, ha dicho a Efe sobre este acto que el Departamento de Seguridad "ha empezado a comprender la importancia" de reconocer a "todos nuestros héroes, los ertzainas que han dejado la vida por proteger a la ciudadanía".
Ha recordado que su sindicato ha tratado de "mantener todos los años la llama de recuerdo" a Txema Agirre, un "ejemplo" del lema policial de "servir y proteger", y se ha congratulado de que año tras año el homenaje al ertzaina cuente con más asistentes.
El Departamento de Seguridad ha explicado que este homenaje es uno de los quince reconocimientos individuales que está promoviendo la Dirección y Jefatura de la Ertzaintza desde que el pasado junio establecieran un "procedimiento para la realización de actos de reconocimiento, memoria y homenaje a las y los ertzainas heridos o fallecidos en acto de servicio en la Ertzaintza".
Con esta nueva regulación se da "cumplimiento al compromiso del Gobierno Vasco de recordar y visibilizar, de manera individual, a cada ertzaina asesinado o asesinada por ETA", ha añadido. Ha precisado que los homenajes deberán respetar siempre el deseo de las familias.
Ha recordado que hubo 15 agentes de la Ertzaintza asesinados por ETA entre 1985 y 2001. El primero fue el superintendente Carlos Díaz Arcocha, y los últimos, Javier Mijangos Martínez de Bujo y Ana Isabel Arostegui Legarreta.
Homenaje al ertzaina Txema Aguirre, asesinado por ETA. / EFE