Azpiazu aplaude a la oposición por no poner "líneas rojas" mientras fija sus condiciones

"Sin líneas rojas". Eso es lo que el consejero de Economía y Hacienda del Gobierno vasco, Pedro Azpiazu, aplaude a la oposición por su actitud para negociar los presupuestos vascos. Sin embargo, al mismo tiempo el propio Gobierno vasco fija como línea roja que no habrá acuerdos en materia fiscal o en materia educativa en esta negociación sobre las cuentas públicas. 

En su valoración sobre la primera ronda de contactos con EH Bildu, Podemos y PP+Cs, el consejero destaca que "ninguno de los tres grupos parlamentarios pone “líneas rojas” de cara a seguir trabajando en un posible acuerdo". Y paradójicamente destaca también que en las reuniones "ha ubicado la negociación dentro del marco presupuestario y del marco competencial del Gobierno vasco".

Esto segundo es una forma eufemística de negar que se vaya a llegar a pactos de índole que no sea presupuestaria. Es decir, no habrá las reformas fiscales o los cambios educativos que reclama la oposición. O, dicho de otra manera, es su forma de fijar sus propias condiciones ineludibles, que consisten en no salirse del marco de las cuentas- 

En dicho comunicado, Azpiazu destaca que tanto Bildu como Elkarrekin Podemos-IU han presentado una propuesta "extensa y cuantificada", que incluye, además, "compromisos políticos de diversa índole"; y, en el caso de PP+Cs, asegura que ha traslado de cuestiones sobre las que "es necesario seguir avanzando en la cuantificación".

Por último, el consejero del Gobierno vasco anuncia que volverá a llamar a los tres grupos a una segunda reunión, a la que acudirá después de analizar la documentación recibida porque, según asegura, su objetivo todavía es "seguir trabajando en la consecución de más apoyos".