Veinte años del asesinato de Joxeba Pagaza con el que ETA intentó (sin éxito) silenciar a Basta Ya!

El 8 de febrero de 2003, pronto se cumplirán 20 años, un miembro de ETA asesinó en Andoain (Gipuzkoa) a Joxeba Pagazaurtundua mientras desayunaba en un bar. Era jefe de la policía municipal, veterano militante del PSE-EE y miembro del colectivo Basta Ya!. Silenciar a este último grupo de ciudadanos comprometidos contra el terror era uno de los objetivos de los terroristas que, por supuesto, no consiguieron. 

Menos de un mes después del crimen, a su hermana, Maite Pagazaurtundua, hoy día eurodiputada de Ciudadanos y luchadora incansable por la memoria de las víctimas, le preguntaban en una entrevista en 'El País' por qué habían matado a su hermano. "Por valiente, por socialista, por ser miembro de Basta Ya!, por ser un hombre libre y comprometido". Palabras igual de válidas ahora, veinte años y muchas lágrimas después. 

El asesinato de Joxeba, al igual que el del periodista José Luis López de Lacalle tres años antes, suponía un ataque directo a un colectivo ciudadano, Basta Ya!, cuyo trabajo y valentía frente al terrorismo se reconocía esta misma semana mediante una exposición en el Parlamento Europeo. Una muestra que se basa precisamente en escuchar los gritos que este grupo padecía por parte del entorno de la banda. Gritos casi inhumanos como el célebre "ETA mátalos".  

La hermana de Joxeba Pagazaurtundúa, y diputada del Parlamento Europeo, Maite Pagazaurtundua. / EP

Una familia, sus cartas y sus actos

La familia Pagaza, liderada públicamente por la hermana citada, Maite, y por la madre de ambos, Pilar Ruiz, se ha convertido en estos veinte años en un símbolo de la lucha contra ETA, contra los que les apoyaban directamente y contra los que callaban por temor o complicidad simulada. En las hemerotecas están momentos como los choques con el PNV o como aquella famosa misiva -"Carta a los nuevos ciegos"- en que censuraban cualquier negociación con los terroristas. 

Precisamente en algunas cartas como las que ilustra este texto el propio Joxeba pronosticaba que sería asesinado por la banda terrorista. "Cada día veo más cerca mi fin a manos de ETA", escribía. Cartas que en 2018, hace cinco años, en el decimoquinto aniversario, hacía públicas la familia. Cartas en las que se veía cómo Pagaza veía venir que acabarían con su vida después de que al Gobierno vasco le obligase a dejar su puesto en la Ertzaintza de Laguardia, adonde había sido enviado en comisión de servicios, para volver a su Andoain natal, donde muchos simpatizaban con ETA, donde gobernaba Batasuna y donde muchos querían apretar el gatillo contra él. 

Será allí, en la localidad guipuzcoana, donde este domingo nuevamente la familia Pagaza, como cada año, celebrará un acto cívico en memoria de Joxeba. 

Los asesinos

La Audiencia Nacional condenó en 2011 a Gurutz Aguirresarobe Pagola como autor del asesinato. No fue condenado por pertenencia a ETA aunque sí quedó probado que había actuado siguiendo las órdenes de la banda. Así lo ratificó después el Tribunal Supremo. 

También fueron condenados después otros dos miembros de ETA naturales de Andoain por participar en el crimen. Quedó probado que Iñaki Igerartegi e Ignacio Otaño, detenidos en 2012 como miembros de un 'comando' dedicado a la extorsión, habían realizado seguimientos a Joxeba para facilitar su asesinato. En 2018, cuando ambos salieron de prisión, fueron recibidos en un 'ongi etorri' multitudinario en el pueblo. 

Aguirresarobe sigue en prisión. Desde el pasado de octubre cumple condena en una cárcel vasca una vez finalizada la dispersión de los reclusos etarras. 

Recuerdo Joseba Pagazaurtundua/ EP