Guía práctica para saber quién ha ganado las elecciones en Euskadi

El 21 de abril el cohete del excéntrico millonario, Elon Musk, hacía su primera prueba en sociedad y despegaba rumbo a no sabemos muy bien dónde. A los pocos minutos del despegue el cohete explotaba. Lo que para la mayoría de nosotros es un rotundo fracaso (seguramente por nuestro desconocimiento de la ingeniería aeronáutica más avanzada) para el propio Musk fue un éxito maravilloso.

El próximo 28 de mayo, una vez se conozca el recuento de las elecciones municipales en Euskadi, sucederá algo similar. Todos habrán ganado y muy pocos aceptarán y asumirán en público (puede que en privado tampoco lo hagan) la derrota (siguen tratando al electorado como a niños).

Pero para eso, para saber quién es el ganador de las elecciones municipales en Euskadi tenemos a la ciencia política.

Un aviso previo: la realidad es compleja y la respuesta a la pregunta atiende a varios factores e indicadores. Será el elector quien atendiendo a esos indicadores decida quién es el ganador de esta contienda electoral.

Una cosa es ganar la campaña y otra muy diferente es ganar las elecciones

Primera aclaración: una cosa es ganar la campaña y otra muy diferente es ganar las elecciones. La campaña la gana quien más votos moviliza y quien es más capaz de atraer más indecisos. Esta pregunta la podremos responder el mismo día 28.

Los indicadores a tener en cuenta para ello serían dos principalmente. El primero lo determinamos por qué partido tiene más votos. El apoyo popular sigue siendo muy importante en una democracia y el partido o los partidos que más votos obtengan son los claros ganadores de esta elección, pero no solo podemos atender al número total de votos de una elección para determinar quién gana una elección, ya que el punto de partida de unas elecciones es diferente según el partido.

Aquí viene el segundo indicador importante. Los incrementos de votos (depende en gran medida de la participación) con respecto a la anterior elección, pero sobre todo los incrementos porcentuales en el número de votos. Con este indicador determinamos qué partido o partidos son los ganadores de la campaña electoral, ya que son los que mejor y de forma más efectiva han atraído votos y convencido a los indecisos.

Sé que hay quienes restan importancia a las campañas electorales, pero la verdad es que la evidencia científica sobre la efectividad de las campañas electorales está más que demostrada

Sé que hay quienes (en un intento burdo por deslegitimar el sistema democrático) restan importancia a las campañas electorales, pero la verdad es que la evidencia científica sobre la efectividad de las campañas electorales está más que demostrada, otro debate es que la comunicación política haya caminado en la actualidad a una banalización y simplificación excesiva de los mensajes y acciones de campaña.

Vamos, ahora a determinar quién ha ganado las elecciones: Para ello es importante responder a la pregunta ¿para qué sirven unas elecciones?

Esto no es un concurso de popularidad de un instituto estadounidense. Las elecciones tienen un fin y este fin es repartir el poder político. En los sistemas democráticos el poder se reparte de una manera plural, ya que son sistemas que huyen de las acumulaciones excesivas de poder como si hacen las dictaduras (por eso tenemos sistemas parlamentarios y separación de poderes).

Bien, aquí la cosa se complica, en primer lugar, porque muchos de los indicadores los conoceremos, no el mismo día 28, sino el día que se constituyan los ayuntamientos y los gobiernos municipales.

Los indicadores que conoceremos el día de la constitución de los ayuntamientos sí son más determinantes

Aun así, vayamos por partes: ¿Qué indicador podremos resolver el mismo día 28? Pues lógicamente el indicador que deriva del apoyo popular que es el número de concejales obtenido por los diferentes partidos. Este es un indicador importante, pero no definitivo para resolver quien tiene más poder tras las elecciones.

Los indicadores que conoceremos el día de la constitución de los ayuntamientos, por el contrario, sí son más determinantes.

El primero atiende al número de ayuntamientos que gobernará cada partido y teniendo en cuenta nuestro sistema parlamentario, ganar la campaña y tener más voto popular no significa ganar las elecciones. Habrá que contar el total de municipios que gobierna cada partido.

El segundo indicador (al cual pocas veces atendemos en Euskadi) es el número total de ciudadanos y ciudadanas sobre el que gobernara cada partido. No es lo mismo, gobernar 20 pueblos de 500 habitantes cada uno que una ciudad de 100.000 habitantes. Es básicamente una cuestión de recursos y atención mediática.

Es importante determinar qué partidos y con cuántos concejales (carteras de gobierno) entra cada gobierno municipal

El último indicador y tal vez el más complicado de valorar es el de la importancia para gobernar de partido minoritarios. Pongamos un ejemplo, un partido retrocede en votos, en concejales y en gobiernos municipales, pero con sus pocos concejales se convierte en un partido capaz de ser determinante en quién gobernara ese ayuntamiento. Por eso es importante determinar qué partidos y con cuántos concejales (carteras de gobierno) entra cada gobierno municipal.

Sé que tenemos, a unos días de la elección, ganas por saber quién ganará estas elecciones municipales y que los indicadores que aquí señalo son complicados de valorar, pero habrá que esperar a la constitución de los ayuntamientos para hacer una foto lo más real posible del pódium electoral. Mientras tanto, este politólogo al que leéis trabajará los números para poder ofrecerlos lo antes posible.