Conducción de los restos mortales del entonces presidente del Gobierno, Luis Carrero Blanco | EFE

Conducción de los restos mortales del entonces presidente del Gobierno, Luis Carrero Blanco | EFE EFE

Política

La huella del magnicidio: reflexiones desde Euskadi sobre los atentados que cambiaron la historia

El historiador Antonio Rivera reflexiona no solo sobre los magnicidios que se consumaron, sino también sobre aquellos que fueron frustrados y nunca llegaron a materializarse

27 septiembre, 2024 05:00

"Muerte violenta dada a persona muy importante por su cargo o poder". Es como la Real Academia Española (RAE) define el término ‘magnicidio’, un fenómeno que abre un abanico de incertidumbres sobre lo que pudo y no pudo, haber sido dependiendo de si los perpetradores consiguieron su cometido, o no. 

El historiador, político y profesor universitario Antonio Rivera explica la exposición 'Magnicidas' que se exhibe desde este jueves en el Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo en Vitoria | Crónica Vasca

El historiador, político y profesor universitario Antonio Rivera explica la exposición 'Magnicidas' que se exhibe desde este jueves en el Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo en Vitoria | Crónica Vasca Crónica Vasca

Según Antonio Rivera, historiador, político y profesor universitario y comisario de la exposición 'Magnicidas' que se exhibe desde este jueves en el Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo en Vitoria, el objetivo de los homicidios es la "búsqueda de la consecuencia inmediata, infundir temor y derribar a la oposición”

El magnicidio no discrimina

Aznar, De Gaulle, Thatcher, Obama y Maduro tienen algo en común.

Por un lado, que son “personas muy importantes por su cargo y poder”, en este caso, personalidades del mundo de la política.

No obstante, no siempre son personalidades asociadas a la política, como en el caso de John Lennon (1980) o el intento de asesinato al Papa Juan Pablo II, tan solo un año más tarde. Las figuras involucradas pueden ser completamente diferentes en contexto e influencia.

Magnicidios frustados

Por otro lado y el quid de la cuestión, el segundo denominador común es que el listado de personalidades mencionadas son magnicidios frustrados. Historias que no fueron. ¿Qué hubiera pasado si…? Estos hechos también tienen especial relevancia en la historia que no ocurrió

Uno de los dos intentos de magnicidio de este verano a Donald Trump | EFE

Uno de los dos intentos de magnicidio de este verano a Donald Trump | EFE EFE

¿Qué hubiera pasado si el atentado contra Charles de Gaulle en 1962 hubiese tenido éxito? ¿Qué hubiera pasado si Trump hubiese estado un centímetro más a la derecha en la intervención del acto de campaña en Pensilvania el pasado julio? Y, si uno de los más de cuarenta atentados que sufrió Franco, ¿hubiera tenido éxito?

Se estima que Fidel Castro (Cuba) fue blanco de 638 intentos fallidos de asesinato, Adolf Hitler (Alemania) de 38, Alejandro II (Rusia) enfrentó 7, y Benito Mussolini, 6, entre otros casos destacados. En España, sobresalen los 9 atentados frustrados contra el rey Alfonso XIII y los 4 intentos contra el expresidente José María Aznar.

Finalmente, la historia queda marcada por los magnicidios que sí sucedieron, y las consecuencias de estos atentados que tienen como objetivo sacudir a la opinión pública, desafiar un régimen tiránico, encender la chispa de la rebelión popular, vengar injusticias o ser la respuesta desde abajo frente a la opresión de los poderosos.

Magnicidios: Historia de España

Franco al igual que De Gaulle, finalmente murió por causas naturales

Sin embargo, no se puede escribir la misma historia para Juan Prim (1870), Cánovas del Castillo (1897), Canalejas (1912), Dato (1921), y Carrero Blanco (1973); cinco eliminaciones de presidentes españoles que ocurrieron en un siglo, entre 1870 y 1973, y que cambiaron el curso de la vida.

Rivera ha querido destacar “el carácter tan distinto que tienen cada uno de estos cinco atentados consumados”.

"No hay mal que por bien no venga"

Antonio Rivera: "A diferencia de otros tipos de violencia, en las sociedades tradicionales, cuando ese poderoso se convierte en un déspota y actúa mal, hay todo un discurso filosófico que legitima la capacidad que tiene la comunidad para acabar con esa situación y restituir el bien”

Según Rivera, queriendo ver el lado bueno de la historia, y en palabras de Franco, “no hay mal que por bien no venga y, añade, a diferencia de otros tipos de violencia, en las sociedades tradicionales, cuando ese poderoso se convierte en un déspota y actúa mal, hay todo un discurso filosófico que legitima la capacidad que tiene la comunidad para acabar con esa situación y restituir el bien”. 

Por lo tanto, estos asesinatos sí cambian el curso de la vida. En el caso de España, desde la Restauración alfonsina (Prim) hasta el final de la dictadura franquista con Carrero Blanco, para dar paso a la escritura de una nueva historia por “un magnicida que tiene como objetivo cambiar el sentido de la historia”, explica Rivera. 

El magnicida se ve representante de la voluntad de la sociedad. Se ve que es el único que es el capaz de hacerlo y que los demás no lo hacen por miedo”, explica Rivera, y añade que “las sociedades contemporáneas nacen de estos magnicidios que se establecen sobre una nueva legitimidad del poder que sustituye al anterior”.

Exposición ‘Magnicidios’ en el Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo

El Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo acoge desde este jueves 26 de septiembre hasta el 5 de enero la exposición ‘Magnicidios. Dar en la cabeza’. Una exposición que, según Florencio Domínguez, Director del Centro para la Memoria de las Víctimas del Terrorismo, ya estaba prevista antes de los dos intentos de asesinato contra Donald Trump

“El magnicidio es una de las expresiones más acabadas del terrorismo. Si el terrorismo pretende interrumpir la continuidad de la vida ordinaria, el objetivo superlativo es atentar contra la personalidad más alta”, sostiene Rivera. 

La muestra está dedicada a los magnicidios: un repaso de lo que han supuesto a lo largo de la historia como “venganza, lucha contra tiranías o para torcer el rumbo de la historia”.

Se exhibe un fusil con silenciador con el que ETA quiso asesinar al Rey Juan Carlos I en Mallorca en 1995; la bomba que no explotó en el atentado de noviembre de 1893 que quiso matar a Salvador Franch; y el revólver que se tomó la vida de Cánovas del Castillo en Mondragón en 1897. 

Un artefacto con una carga de 50 kg de goma-2 costó la vida a Carrero Blanco y sus escoltas | EFE

Un artefacto con una carga de 50 kg de goma-2 costó la vida a Carrero Blanco y sus escoltas | EFE EFE

Asimismo, se expone un manuscrito de la llamada “Operación Ogro” en la que ETA asesinó a Carrero Blanco, el último de los presidentes en cerrar en 1973 hace 50 años, un siglo en el que se efectuaron cinco magnicidios a presidentes españoles, y del que ya han pasado más de cincuenta años.