Este jueves, EH Bildu anunciaba en el Congreso de los Diputados el acuerdo con el Gobierno central para reformar la Ley de Seguridad Ciudadana, conocida como Ley Mordaza, que incluye la eliminación de las pelotas de goma o el fin de las 'devoluciones en caliente'.

El PNV, uno de los socios que dan soporte al Gobierno de Sánchez, se alegra de que se pueda tramitar esta proposición de Ley —se pretende registrar este viernes en el Congreso— y asegura que firmará a favor, aunque podría enmendarla porque tienen "dudas" sobre dos de los cuatro artículos pactados con el Gobierno central y es que, entre otras cuestiones, los nacionalistas vascos quieren que se mantenga el principio de autoridad. 

Pese a que el PNV celebra este acuerdo, los jeltzales sostienen que recoge "básicamente" la iniciativa que ellos presentaron en 2017 y recuerdan que aquella fracasó porque EH Bildu y Esquerra Republicana (ERC) "dijeron en aquel momento que 'todo o nada'". "De haber salido adelante, se habrían ahorrado cientos de sanciones desproporcionadas", ha asegurado el portavoz del PNV en el Congreso, Aitor Esteban. 

En aquella ocasión, existía una mayoría suficiente para modificar 36 artículos de la Ley que había elaborado el Partido Popular de Mariano Rajoy. "Se consiguieron cambios profundos, mientras que otros se quedaban en el eslogan y en la pancarta", ha defendido Esteban. 

Jon Iñarritu y Mertxe Aizpurua, diputados de Bildu en el Congreso, anuncian que han llegado a un acuerdo con el gobierno de coalición | Europa Press EUROPA PRESS

Estudiar dos cuestiones

Por lo pronto, el PNV asegura que necesita estudiar más detalladamente dos cuestiones. La primera, la que hace referencia "a la desobediencia manifiesta, a la resistencia a la autoridad, a resistirse a las órdenes de los agentes o a no querer proporcionar tu identidad o dar datos falsos cuando una autoridad, evidentemente en cumplimiento de sus obligaciones y respetando la Ley, pide que te identifiques". "Que se mantenga el principio de autoridad es fundamental para el orden público"

La segunda, tiene relación con las injurias y calumnias o lo que la Ley califica como "falta de respeto y era genérico". "Nosotros propusimos en su momento que había que modificar esto y acotarlo, que tuvieran que ser actitudes concretas", ha recordado.

Con este acuerdo, aseguran, "se vuelve otra vez a la generalidad porque se habla de injurias y calumnias en general y, además, parece que únicamente por expresiones verbales". "Se convierten en leves, pero es que, si la persona que lo ha cometido dice que se arrepiente, desaparece cualquier tipo de sanción. Suena raro, lo puedes hacer un día y al día siguiente también", ha manifestado. 

Toque de atención al Gobierno 

Según han informado los nacionalistas vascos, tuvieron acceso a los cuatro artículos pactados la mañana del jueves porque se los envió la portavoz parlamentaria de EH Bildu, Mertxe Aizpurua, quien le llamó el miércoles por la tarde para informarle del acuerdo. 

Por su parte, con el Gobierno central no han tenido comunicación. "No nos lo han comunicado. Ellos sabrán, pero el Gobierno sabe que este tema nos preocupaba y nos ocupaba", ha resaltado. Por eso, creen que "lo mínimo y lo más lógico" hubiese sido informarles de que estaban avanzando en este tema y consultarles la opinión al resto de partidos políticos.