El laberinto de la reforma fiscal en Euskadi: las Diputaciones piden un acuerdo y Podemos se deja querer

Parece que a PNV y a PSE-EE les está costando encontrar un socio para aprobar la reforma fiscal en Álava y en Gipuzkoa, donde no cuentan, a diferencia de en Bizkaia, de mayoría absoluta. 

Si cuando parecía que Podemos Euskadi podía ser esa alternativa, los morados anunciaron que no podían llegar a un acuerdo puesto que la consulta que realizaron a sus bases "no era concluyente". 

Pese a que ganó el sí —por muy poco margen— Podemos considera que este resultado, unido a la baja participación de menos del 25%, no es suficiente como para llevar a cabo un acuerdo en esta materia.

Así, en estos momentos, no existe un socio claro para aprobar la reforma fiscal y el escenario se presenta complicado también con el resto de partidos políticos. Todo un laberinto que parece no tener una salida clara. 

Bildu enmienda a la totalidad

También EH Bildu fue uno de los posibles socios que se barajaban hasta hace poco, sobre todo por parte de los socialistas, quienes se decantaban por los abertzales para conformar un acuerdo. 

Sin embargo, Bildu criticó el proyecto presentado por PNV y PSE-EE y llegó a asegurar que se trataba de una reforma "de derechas" que buscaba el apoyo del PP. Finalmente, la semana pasada, anunciaron que presentarán una enmienda a la totalidad.

Algo que no ha gustado a los nacionalistas vascos, quienes consideran que esta no es la mejor forma de negociar. "Quien quiera negociar y acordar, negocia y acuerda y quien no, presenta enmiendas a la totalidad", señalaba hace unos días el portavoz del PNV en el Parlamento vasco, Joseba Díez Antxustegi. 

El portazo de EH Bildu a la reforma fiscal forzará cambios en el acuerdo de PNV y PSE

Las Diputaciones piden "altura de miras" 

Por su parte, ante la complicada situación que se presenta, las tres Diputaciones forales piden "responsabilidad y altura de miras" a Bildu, Podemos y PP.

Para los tres territorios, su propuesta de revisión fiscal es "sensata y realista" y beneficiaría a más de un millón de contribuyentes. "Es el momento de acordar y dialogar porque es un planteamiento bueno. Es un gran proyecto". 

En este sentido, rechazan posibles "vetos" y apelan a estas tres formaciones políticas a avanzar en el camino "dejando a un lado estrategias políticas y partidistas". Además, aseguran que van a seguir negociando con todas los partidos que estén dispuestos a establecer un "diálogo serio y constructivo".

Las tres diputaciones vascas hablan sobre las negociaciones sobre la reforma fiscal / JUAN HERRERO - EFE

Podemos no cierra la puerta

Pero, de momento, no parece que ninguna de las tres alternativas —Podemos, Bildu o PP— vayan a ser la pieza que complete el puzle.

La situación es complicada con Bildu porque, aunque no se cierran a negociar, lo más seguro es que, presentando una enmienda a la totalidad, el acuerdo sea bastante improbable. 

"Esto requiere rigor y seriedad. Cuando uno no tiene mayorías suficientes, tiene que negociar y, desde luego con EH Bildu, se negocia o se negocia. Y se negocia, además, sobre los elementos que son esenciales cuando se aborda una reforma fiscal", señalaba la parlamentaria Nerea Kortajarena. 

Por parte de los populares vascos también hay críticas al gobierno. Para el PP, la disposición a negociar de PNV y PSE-EE  ha sido "nula" y critican que todavía no les hayan llamado para hablar de las propuestas que les presentaron hace casi un mes. 

Sin embargo, no cierran la puerta a las negociaciones aunque, eso sí, insisten en que hablaran sobre sus propuestas y no las de Podemos. 

Para Podemos Euskadi nada ha cambiado con la comparecencia de las tres diputaciones y sostienen que replantearán su postura cuando haya modificaciones "significativas". 

Recuerdan, además, que no se han levantado de la mesa de diálogo y que seguirán negociando siempre y cuando haya "modificación estructural" de la propuesta de las Haciendas. 

Con todo ello, actualmente, la situación se presenta complicada para el Gobierno vasco para poder pactar, hasta el punto de que, aunque en Bizkaia cuenta con mayoría, la Diputación de este territorio ya no tiene tan claro si aprobará la reforma fiscal en solitario.