Finalmente, Podemos Euskadi será la pieza que complete el puzle para poder aprobar la reforma fiscal. La formación morada ha introducido 27 medidas para, entre otros objetivos, "favorecer a las rentas más bajas" o "mejorar el acceso a la vivienda a un precio asequible".
En rueda de prensa, el coodinador general de Podemos Euskadi, Richar Vaquero, ha asegurado que "no" es la reforma que deseaban, ni alcanzan con ella "todos sus objetivos", pero ha insistido en que "no era coherente" mantenerse en el 'no' porque buscan "el bienestar de a ciudadanía vasca".
Hay que recordar que, hace una semana, Podemos rechazó el proyecto presentado por PNV y PSE-EE. Ahora, según indican, ha sido posible el acuerdo "por el cambio en las aportaciones que realizan a las rentas altas, las rentas de capital y a las grandes empresas".
Y, a diferencia de como lo hicieron anteriormente, esta vez no llevarán a cabo una consulta para preguntar a sus bases. "Ha habido mejoras significativas y en base a los tiempos, hemos recurrido a los órganos más representativos del partido", ha señalado Vaquero.
Según ha explicado el coordinador general, esta reforma, que beneficiará a más de 1.038.000 personas en Euskadi, busca favorecer a las rentas más bajas y al tejido productivo más vulnerable, revertir la pérdida de recaudación para que "paguen más quienes más tienen" e impulsar la salida de vivienda al mercado de alquiler, entre otros objetivos.
Vivienda, autónomos y grandes empresas
Entre las medidas, destaca el cambio en la estructura del sistema fiscal vasco, que va a posibilitar que las rentas por debajo de 20.000 euros no paguen impuestos y reciban de las haciendas forales hasta el 35% de lo que han abonado en concepto de alquiler.
De esta forma, más de 8.000 personas con rentas bajas que pagan alquiler, verán sus ingresos complementados. Un medida que está pricipalmente dirigida a jóvenes, mujeres, familias monoparentales y numerosas.
Asimismo, las propuestas de los morados también están dirigidas a apoyar el tejido económico más vulnerable, entre ellos autónomos y pymes, con más de 52,5 millones de euros.
En materia de vivienda, se destinan 21 millones para, entre otra medidas, que las rentas bajas puedan recuperar hasta 2.800 euros de los pagos que realizan al alquiler o penalizar en el IBI a la vivienda vacía para impulsar su salida al mercado del aquiler.
Además, defienden la idea de que "quien más tiene va a pagar más". Por eso, la rentas altas no podrán acceder a las deducciones por compra o alquiler de vivienda, el tratamiento de las rentas de capital pasará de un máximo de un 25% de tributación a un 28% o se establece una limitación a las exenciones a las EPSV.
También se incrementan los tipos en el impuesto de sociedades y, por ejemplo, los gravámenes de los beneficios extraordinarios de las grandes empresas pasarán del 24 al 28%.
Compromisos políticos
Desde la formación han expuesto también los compromisos políticos alcanzados. En primer lugar, se remitirá al Eustat, entre marzo y abril, la información de la que disponen las Diputaciones Forales para la elaboración de los índices de referencia.
Y, en segundo lugar, el desarrollo y la entrada en vigor en 2025 del nuevo impuesto a las grandes entidades finacieras.
Las diez claves de la reforma fiscal
Según ha recogido EFE, tras el acuerdo entre Podemos Euskadi y PNV y PSE, las medidas pactadas afectan a la obligación de declarar, a las deducciones de vivienda, a las EPSV o al Impuesto de Sociedades.
- La obligación de declarar se eleva 20.000 euros, lo que supone que 342.500 personas con rentas inferiores a esa cantidad no tendrán que presentar declaración si no quieren, una medida que afecta directamente a las personas que cobran el Salario Mínimo Interprofesional. En el Estado la intención es que los que cobran el SMI sí tengan que presentarla.
- Más de 8.000 personas que pagan alquiler y que tienen rentas muy bajas, inferiores a 20.000 euros, se podrán deducir un 35 % de lo que abonan por alquiler, con un límite de hasta 2.800 euros, aunque para recibirlo tendrán que presentar la declaración.
- Un total de 107.000 autónomos, microempresas y pequeñas empresas van a poder deducirse un porcentaje mayor en sus de gastos.
- Se establece un límite de renta en 68.000 euros para la aplicación de la deducción del alquiler y de la deducción por adquisición de vivienda, es decir, todas las personas que ganen más de esa cantidad no podrán acceder a las deducciones vigentes hasta ahora.
El matiz es que se aplicará solo a los nuevos contratos, de manera que las personas que se hayan comprado un piso ya en años anteriores podrán seguir con su deducción por la adquisición aunque ganen más de 68.000 euros. - También se va a elevar el recargo del IBI al 150 % para viviendas vacías en Álava y Bizkaia.
- Las rentas de capital procedentes de acciones, bonos, inmuebles o participaciones en sociedades, que se recogen en forma de intereses, dividendos, plusvalías o rentas inmobiliarias van a pagar más, ya que el tratamiento de las rentas de capital pasará de un máximo de un 25 % de tributación a un 28 %.
- Aumenta la tributación en los rescates en forma de capital (de golpe, no una renta de mes a mes) de las EPSV.
- Se incrementan los tipos a las grandes empresas, con un incremento del Impuesto de Sociedades por beneficios extraordinarios, de forma que habrá un incremento del tipo de forma escalonada del 24 al 28 % para las grandes empresas que hayan obtenido beneficios extraordinarios, y a partir del 35 % de la media de los 3 ejercicios anteriores.
También habrá un incremento de la tributación efectiva mínima en sociedades pasando el 17 % actual al 19 % para las grandes empresas que no mantengan ni creen empleo ni realicen inversiones. - Entrada en vigor en 2025 del nuevo impuesto a las entidades financieras, que hasta ahora no se aplicaba en Euskadi. También en las EPSV se limita el importe de la reducción conjunta, de 12.000 a 10.000 euros.
- Se pacta la remisión al Ministerio de Vivienda de la información disponible en las diputaciones forales para elaborar los índices de referencia con los cuales se topa el alquiler en los municipios tensionados