La internacionalización de las compañías vascas sigue avanzando

Las empresas de la Comunidad no son ajenas a un proceso en auge en todo el mundo gracias a los avances tecnológicos

El fenómeno de la internacionalización ha crecido de forma imparable en la última década. A nivel económico mundial, compañías vascas de toda clase y tamaño están operando comercialmente en el extranjero. Además, las exportaciones vascas gozan de excelente salud: el año pasado se quedaron a apenas 133 millones de euros de llegar al máximo histórico de 2018.

La economía global es el resultado de la relación comercial entre naciones, posible gracias al rápido avance de las tecnologías, de los medios de comunicación, y el transporte. Actualmente, existe un intenso movimiento de capital internacional. Los países que producen un determinado bien, insumo o servicio, pueden ahora comerciar con ellos en todo el mundo. Y Euskadi no está desaprovechando la ocasión, como vamos a ver a continuación.

Iniciativa privada: el ejemplo del Banco Santander

El Banco Santander apuesta por la internacionalización de las empresas vascas. En 2021 incrementó en un 4 % la financiación de la internacionalización de dichas empresas. La suma total financiada no fue nada desdeñable: 2.240 millones de euros.

Esta cifra es importante, además, porque deja patente que la actividad exterior del tejido empresarial vasco está recuperándose a buen ritmo tras el parón registrado por la crisis sanitaria mundial. Así, ya son 4.800 las compañías vascas que pueden desempeñar hoy su actividad de internacionalización gracias a la acción del Banco Santander. Cabe destacar que esta apuesta podría tener un impacto sobre las acciones Santander, disponibles ahora para negociar online desde cualquier dispositivo conectado a internet, con requisitos de margen mínimo y sin cobro de comisiones.

Iniciativa pública: el ejemplo de las becas de la SPRI

La iniciativa del sector público también apuesta decididamente por la internacionalización de las compañías vascas. Es algo importante, porque las sinergias resultantes de las colaboraciones entre organizaciones públicas y privadas suele ser potente. Así, destaca el caso de la SPRI, la Agencia Vasca de Desarrollo Empresarial, dedicada a la promoción de nuestras empresas.

Recientemente, se publicaba la noticia de que la SPRI sacará 100 becas  a menores de 30 años para su formación especializada en comercio exterior. Durante un periodo de dos años, las personas seleccionadas tendrán ocasión de desarrollar sus competencias en materia de internacionalización y podrán adquirir experiencia real en este campo. Se trata de una iniciativa muy interesante, ya que preparará a los jóvenes para subirse al carro de la internacionalización y hará posible que puedan contribuir a su desarrollo en el tejido empresarial euskaldún.

Conclusión

Resumiendo, la internacionalización puede proporcionar a las empresas vascas acceso a un mundo de oportunidades. Salir de la zona de confort para comerciar internacionalmente puede hacer que nuestros negocios sean más fuertes, más exitosos y más rentables.

En general, la expansión de los negocios internacionales tiene muchos beneficios. Este desarrollo puede aportar a las empresas innovaciones, mejoras y eficiencia en sus productos, servicios y en el conjunto de sus operaciones comerciales. Por ello es esperanzador para nuestro tejido empresarial ver cómo tanto desde instancias públicas como privadas se aspira a una presencia internacional cada vez mayor de las compañías vascas.

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