La consejera aseguró el pasado miércoles que había habido dos vacunaciones 'sospechosas' y que su departamento había realizado "indagaciones" sobre dos directivas, la directora médica y la directora de enfermería de la Organización Sanitaria Integrada (OSI) de Debabarrena, aunque se descartaba que hubiese otro caso de 'vacunazo'. Eso es lo que ella pensaba y aseguró en sede parlamentaria. Pero las dos profesionales de Osakidetza, al parecer, no comparten la opinión de la hasta ayer su jefa y unas horas después de la comparecencia de Gotzone Sagardui presentaron su dimisión. Los motivos personales fueron  la causa argumentada. Pero la realidad es que las palabras de la consejera de Salud del Gabinete de Iñigo Urkullu quedan, de nuevo, en entredicho y sobrepasadas por los hechos.

La dimisión de las dos directivas que Sagardui 'perdonó' durante su alocución en la Cámara vasca no ha sido la única mala noticia, ni mucho menos, que la consejera ha recibido en las últimas horas. Ya por la mañana, la máxima responsable de la Sanidad pública se desayunó con la filtración en 'El Correo' de los mensajes de WhatsApp intercambiados con José Luis Sabas, ex gerente del hospital de Santa Marina, en los que no queda del todo claro que la política del PNV supiese o no si se estaban vacunado los directivos, pero sí que estaba al tanto de la inyección masiva en el centro. De hecho, su responsable de prensa, envió un equipo de TVE a grabar el proceso de vacunación. Sabas, según estos mensajes, deja claro el mismo viernes 15 que "el punto fuerte era que se va hacer a la totalidad del personal en una jornada", lo que no aclara -o así puede interpretarse- es que en ese "toda la plantilla" estén los directivos, pero sí que desde luego supera ampliamente el límite del 50% de vacunaciones recomendadas en una primera fase.

Petición de dimisión de Sagardui

El descontrol en el proceso de vacunación del personal sanitario de Osakidetza ha puesto también en el punto de mira de los partidos de la oposición, en minoría parlamentaria, a la consejera de Salud, Gotzone Sagardui, cuya dimisión ya ha sido solitada por EH Bildu y Elkarrekin Podemos-IU, un día después de la comparecencia, mientras que PP y Vox ya lo habían pedido durante la comisión parlamentaria del miércoles. Todos los partidos de la oposición, por tanto, creen que la consejera debería echarse a un lado tras admitir errores en la coordinación de la vacunación, un caos que ha derivado en irregularidades en la vacunación en diferentes hospitales de Euskadi.

"Es increíble lo que ha pasado con las vacunas", ha asegurado este jueves la parlamentaria de EH Bildu Rebeka Ubera, que considera que la consejera "ha mentido" durante su comparecencia en el Parlamento de este miércoles, mientras ve "descontrol absoluto" en la campaña de vacunación. "Es inadmisible actuar con semejante frivolidad y descontrol", ha criticado Ubera, quien entiende que "por mentir, por el descontrol de la vacunación, por la falta de transparencia y por ensuciar la imagen de Osakidetza en un momento tan delicado como este, la consejera Sagardui y la directora general de Osakidetza deben dimitir". "No pueden seguir ni un segundo más en sus cargos", asegura.

También la portavoz de Elkarrekin Podemos-IU, Miren Gorrotxategi, reclama a la consejera de Salud que presente su dimisión por las irregularidades en la vacunación. A las puertas del Parlamento vasco, Gorrotxategi considera que las explicaciones ofrecidas por Sagardui en torno a la vacunación descordinada no han despejado las dudas sobre lo ocurrido, y cree que la consejera carece de la "fuerza" y de la "credibilidad" necesaria para seguir al frente de Salud.

Los sindicatos piden su salida

Además, los sindicatos Satse, ELA, LAB, CCOO, UGT y ESK, convocantes este jueves de una jornada de huelga en Osakidetza, han reclamado la dimisión de la consejera de Salud, Gotzone Sagardui, por el "descontrol" que, según han denunciado, existe en el proceso de vacunación contra la covid-19 en el Servicio Vasco de Salud.



"La actitud de la consejera es grave y lo que tiene que hacer es dimitir", porque "cuando una persona tiene una responsabilidad en el departamento y asume que ha habido una falta de coordinación y estrategia debe asumir su responsabilidad y no eludirla y trasladarla a otras personas", ha sostenido la portavoz de Satse, Amaia Mayor, en una postura que, según ha asegurado, comparten el resto de sindicatos.