“El 8M no es que sea necesario, es imprescindible”, comentaba María en la manifestación de esta mañana en la plaza bilbaína de Pio Baroja. Este año es excepcional y el nivel de riesgo es mayor, “todo se puede entender, pero hay muchas mujeres que no hemos faltado a ni una sola manifestación desde 1977, la primera que se celebró en Bilbao cuando no venia nadie, y esta tarde no vamos a estar, no por gusto, para cuidarnos”, argumentaba María. La tónica de esta manifestación es clara: reivindicar los derechos de la mujer manteniendo las distancias y cumpliendo con todas las normas de seguridad.
“Están criminalizando el movimiento”, decían desde la asociación de trabajadores CGT- LKN. Estas manifestaciones están teniendo especial cuidado con el cumplimiento de la normativa para reivindicarlo de forma segura. “Aquí estamos muy señaladas, nos miran con lupa. En muchas otras manifestaciones no se han cumplido las normas como aquí, pero nos volverán a culpabilizar, como ya lo hizo la extrema derecha el año pasado”, comentaba una mujer de la asociación. “Un año más tarde todo el mundo ha comprado el diálogo de la extrema derecha”, comentaba otra de las manifestantes.
La plaza de Pio Baroja, como muchas otras, se ha teñido de morado con espacios en blanco. “Todo el mundo ha recibido información de cómo hay que proceder para que sea un espacio seguro”, comentaba una de las organizadoras. Un 8M, que es más necesario que nunca. "Se ha visto como en esta crisis sanitaria las grandes protagonistas hemos sido las mujeres. En la sanidad, en los cuidados, en la limpieza... se ha visto que somos más necesarias que nunca, como esta manifestación”, reconocía, Iratxe, una de las manifestantes.
La de Bilbao es solo un ejemplo de la gran marea morada que va a teñir las calles de Euskadi hoy. Durante este 8M están previstas 118 marchas para reivindicar el Día de la Mujer, “nos sobran reivindicaciones, esto es solo una puesta en común de los que hacemos las mujeres del mundo todos los días”, comentaba una compañera de María. Bilbao y Vitoria tienen cita a las 19.00 en la plaza de San Antón y del Sagrado Corazón, respectivamente. En Donostia la manifestación del Movimiento Feminista de Euskal Herria comenzará a las 18.30 desde el túnel del Antiguo.
Feminismo antiracista
Este año el Movimiento Feminista de Bilbao ha querido hacer hincapié en la mujer racializada. La localización escogida, la nueva Oficina de Extranjería, quiere reforzar, precisamente, la denuncia de la Ley de Extranjería vigente. A través de un muro, hecho con cajas, han querido representar el ‘muro de las dificultades’ que tienen las mujeres de otras razas que llegan a Euskadi. Además, en el suelo también se han dibujado unos números, que cifran todas las mujeres que no han conseguido llegar a su destino y que han perdido la vida en las fronteras. “Queremos denunciar los muros y fronteras que asesinan diariamente a miles de mujeres en sus desplazamientos. Exigimos la colectivización y la corresponsabilización de los cuidados. Nos negamos a sostener la vida en regímenes de explotación y precariedad”, comentaba la portavoz del colectivo, agregando que el “machismo y el racismo sigue presente”.
“Queremos mostrar nuestro apoyo por todas las mujeres que están en el mundo recibiendo violencia y maltrato, sufriendo. Queremos que nuestra voz llegue a todo el mundo, desde las mujeres saharauis que están sufriendo en su país hasta las mujeres marroquíes que solo quieren vivir con sus derechos”, comentaban dos de las protagonistas de la concentración que aparecen en la foto. Todas coinciden con la idea que ha transmitido el colectivo organizador acerca de que “el resultado es la precariedad que inunda nuestras vidas, donde los derechos están siendo sistemáticamente violados”. En la manifestación había mucha representación de diferentes colectivos de educación, sanitarios o del comercio. Al finalizar el acto, el muro de cajas se ha caído parcialmente y el parte de las allí presentes han acabado de derribarlo, derribando también ese racismo hacia las mujeres.