El sector hotelero vasco ve "esperanzadores" los datos tras el fin del estado de alarma

El sector turístico vasco asiste con optimismo a la llegada del verano. El fin del estado de alarma y la apertura a la movilidad, así como el descenso apreciado en las últimas semanas de contagios de la covid-19 auguran una reactivación de un sector muy castigado por la pandemia y los expertos consultados por 'Crónica Vasca' se muestran ilusionados con vistas a una recuperación en verano que, en todo caso, no prevén que sea todavía pueda asimilarse a la época anterior a la aparición de la pandemia.

Desde la asociación Hoteles de Gipuzkoa creen que el verano puede resultar positivo para el sector aunque todavía no se atreven a pronosticar en qué términos puede cuantificarse la subida. "Todavía es pronto para predecir qué va a ocurrir. Los datos son esperanzadores pero aún seguimos con la incertidumbre que provoca la pandemia", comentan desde la asociación. Desde SEA Hostelería de Álava, Elena Martín, portavoz de SEA y a su vez responsable del hotel Jardines de Uleta, coincide con sus colegas guipuzcoanos en que "todavía no sabemos qué va a ocurrir. tenemos esperanza de que mejoremos, pero hay muchas cosas que todavía no se pueden hacer como cócteles, bailes, catering... Las restricciones siguen más o menos igual dentro de los hoteles", comenta.

En Bizkaia, la asociación hotelera Destino Bilbao califica la retirada del estado de alarma y de los cierres perimetrales como "un pasito adelante", Su máximo responsable, Álvaro Díaz-Munío, revela que en la capital vizcaína hay todavía un 30% de los hoteles cerrados y que los que permanecen abiertos todavía sobreviven muy escasos de ocupación. "Todavía es pronto para llegar a conclusiones. Hay que esperar a que las expectativas se consoliden", apunta Díaz-Munío. De momento, el volumen de reservas se sitúa "al nivel de la pasada semana" aunque es cierto que el cambio de situación le provoca "optimismo porque parece que vamos alcanzando la normalidad".  Para Destino Bilbao, los hoteles no se van a recuperar del todo "hasta que los aeropuertos funcionen como antes y hasta que se concrete un calendario de eventos, actos y congresos", resume. 

Además, la pandemia ha cambiado algunas costumbres con respecto a la situación anterior. "Ahora hay muchas más reservas de última hora que antes y es más difícil hacer previsiones", explica Elena Martín. El también hotelero vitoriano Iván Saldaña, incide en el cambio de modelo experimentado por el sector en cuanto a las reservas se refiere. "Se están quitando las penalizaciones por anulación de reservas y yo creo que esto va a seguir así", afirma. De todos modos, el dueño de varios establecimientos en la capital alavesa como los apartamentos Irenaz, Diván y el Hotel Hito cree que el aumento de reservas ya se está dejando notar "aunque no vamos a llegar a los niveles de 2019, que fue un año estrella para el sector". En su caso, por lo que va viendo, "las reservas son más de cliente nacional y bastante cercano, de familias sobre todo".

Desde el Hotel Costa Vasca, de San Sebastián, todavía no han notado un aumento significativo de reservas, al contrario de lo que sucedió en marzo. "Todavía estamos en zona roja y eso sigue influyendo", recuerdan desde el hotel. Ahora bien, el optimismo se acentúa debido a la paulatina bajada de casos positivos "y esperamos que se vaya notando". Todavía hay bastantes establecimientos hoteleros que permanecen cerrados en la capital guipuzcoana aunque la previsión es que la mayoría de ellos reabran a partir de este fin de semana.

Desde la asociación vasca de casas rurales Nekatur también se muestran optimistas con el futuro y, aunque todavía no hay datos, en su página web se alegran de que "por fin se han puesto fin a las restricciones de movilidad y a partir de ahora podemos acoger gente tanto de Euskadi como de otras Comunidades Autónomas como del extranjero". Eso sí, recuerdan las actuales limitaciones que siguen en vigor y piden prudencia a sus posibles clientes.