Los puntos de vacunación de alto rendimiento, conocidos como 'vacunódromos', de Euskadi cierran este jueves sus puertas después de siete meses y con el 88,5% de la población diana inmunizada con la pauta completa contra la covid-19.



Los centros de vacunación masiva de BEC (Bizkaia), la Casilla (Bizkaia), Illumbe (Gipuzkoa), y el Frontón Lakua (Álava) están recibiendo hoy a sus últimos usuarios, después de haber servido para inocular, junto con otros puntos habilitados, 2.060.000 dosis de vacunas contra la covid-19.



A partir del viernes se reorganizarán los centros de vacunación, que en su mayoría se derivarán a hospitales como los de Basurto, Galdakao, Cruces, Urduliz, Leza, Eibar y el Alto Deba, además de otros centros de Osakidetza como el centro de salud de San Martín, en Vitoria, el PAC de Sestao, el centro de salud Zaballa de Barakaldo, el centro de salud Buenavista de Portugalete y el ambulatorio de Azpeitia.



Se mantiene, en el Bidasoa, el polideportivo Artaleku de Irun como centro de vacunación, mientras que también se inocularán vacunas en el centro municipal el Ferial de Tolosa, el cine Gurea de Villabona y el frontón Arrate de Andoain.



Los grandes "vacunódromos" cierran con datos de vacunación muy avanzados, ya que el 90,1 % de los vascos mayores de 12 años tienen una dosis y el 88,5 % cuentan con la pauta completa.



Estos datos de vacunación y la bajada de la incidencia han llevado al lehendakari, Iñigo Urkullu, a convocar el próximo martes una nueva reunión del LABI, en la que se espera que puedan relajarse algunas restricciones.