"El riesgo sigue siendo muy alto". Así lo ha explicado la consejera de Salud, Gotzone Sagardui en la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Gobierno. Ómicron sigue poniendo en jaque el sistema sanitario vasco con una evolución que "no es buena" y antes la cual Osakidetza tiene que "adecuarse constantemente". En los últimos días, Sagardui ha venido informando de novedades en cuanto al rastreo de contagios y a la forma de actuar de aquellos que den positivo a las cuales ahora se añade otra nueva cuestión. Desde ahora, Osakidetza solo rastreará únicamente para una prueba diagnóstica a aquellos contactos estrechos que sean de colectivos vulnerables.
Durante la última jornada se han notificado 11.923 positivos en las 29.158 pruebas realizadas. La incidencia acumulada es de 6.844 casos por cada 100.000 habitantes, mientras que hay 793 personas ingresadas en planta y 139 en las UCI. Hasta ahora, quien daba positivo en una prueba adquirida en una farmacia, se pedía que se informara a Osakidetza. Ya no. Ahora debe aislarse en casa, y si los síntomas empeoran será atendida, y se confirmará el positivo si la persona necesita la baja.
La consejera ha explicado que se ha "adecuado" la estrategia, con cambios dirigidos a ganar en rapidez de diagnóstico, aligerar la carga de trabajo de la Atención Primaria y centrar los esfuerzos de los equipos de rastreo en los más vulnerables. "Son medidas que están dando sus frutos", afirma. Aquellos contactos estrechos que sean de grupos vulnerables, tendrán tres vías para notificar dicha situación: a través del formulario de Osakidetza, contactando por teléfono con su centro de salud y desde ahora también mediante un nuevo apartado en la web de "Cita previa" que permitirá coger hora para una prueba diagnóstica.
La consejera de Salud ha afirmado que la evolución de la pandemia en Euskadi y en el conjunto de las comunidades autónomas y de los países del entorno "no es buena" y ha advertido de que "la supuesta menor gravedad" de la variante Ómicron "no debe hacernos olvidar que el riesgo sigue siendo o muy alto, especialmente para las personas vulnerables".
"A mayor número de personas contagiadas, mayor índice de hospitalizaciones, mayor número de personas ingresadas, mayor riesgo de muertes entre las personas contagiadas, incluso entre las más jóvenes, y el sistema sanitario se mantiene tensionado", ha advertido