Médicos, enfermeros, auxiliares de enfermería, celadores...el personal de la sanidad pública vasca está "desbordado física y psicológicamente". La sexta ola del coronavirus ha golpeado a Euskadi haciendo explosionar el sector de la sanidad y los colegios médicos vascos, junto con los sindicatos sanitarios, Satse, ELA, LAB, CCOO y UGT salen este domingo a la calle para lanzar un SOS a la sociedad vasca y un mensaje directo al Departamento de Salud: "la Atención Primaria se hunde" y los profesionales sociosanitarios no pueden más ante las elevadas cargas de trabajo a las que tienen que hacer frente diariamente y que la pandemia ha llevado hasta la extenuación laboral. Por ello, los profesionales de Osakidetza piden que Salud adopte medidas urgentes antes de llegar a un punto de no retorno que perpetúe la "situación insostenible" de la sanidad pública
Problemas estructurales
El personal sociosanitario lleva ya años denunciando las "carencias estructurales" que padece la sanidad, acrecientadas en la Atención Primaria que es la puerta de entrada a la salud de los ciudadanos vascos. Unas carencias que el coronavirus se ha encargado de aflorar y tensionar y que refleja una "flagrante falta de medios, de organización y de planificación". La actual crisis provocada por la explosión de contagios con la variante ómicron no es una situación "coyuntural, fruto de la pandemia". Los sindicatos médicos exponen que la actual crisis sanitaria ha venido a "agravar, aún más", una situación "estructural muy anterior a la pandemia". Y es que ya en 2019, los trabajadores de la atención primaria secundaron tres jornadas de huelga para denunciar la gravedad de la situación que se vivía entonces y que, "a día de hoy, dos años después, solo ha ido a peor".
Ya en las primeras semanas del pasado mes de diciembre cuando la tasa de incidencia del coronavirus estaba situada en los 791 casos por 100.000 habitantes, lejísimos de los casi 7.000 puntos que hemos rozado en las últimas fechas, la sexta ola del coronavirus la atención primaria ya estaba absolutamente colapsada con consultas que se iban hasta los 10 días de espera y que el cambio en el protocolo de Osakidetza no hizo sino más que dilatar en el tiempo.
Recortes y precariedad laboral
Los sindicatos denuncian que la gestión del Departamento de Salud está dirigida a "desmantelar" la atención primaria, mientras Osakidetza continúa utilizando la covid-19 para "tapar un déficit" que ellos entienden "estructural". Según han indicado, solo así se entiende que, casi dos años después de la primera ola, se esté afrontando la sexta con una "flagrante falta de medios, de organización y de planificación".
En este sentido, reprochan que, hace apenas dos meses, Osakidetza decidió "prescindir de 4.000 profesionales; que hace solo unos días se estuviera exigiendo al personal residente trabajar gratis; que la plantilla soporte una tasa de temporalidad que roza el 60% o que se hayan desmantelado los equipos de vacunación y rastreo". Igualmente han denunciado que "no se sustituyen bajas, vacaciones y otras ausencias y que, cuando los contagios están batiendo récord, se haya decidido restringir los horarios de centros de atención primaria".
Los colegios de médicos de Bizkaia y Álava exponen que la sanidad pública vasca lleva arrastrando muchos años el problema de la "precariedad laboral" con enormes cargas de trabajo y falta de medios tanto técnicos como humanos para poder atender bien a las necesidades de salud de la población vasca. Por todo ello, hacen un llamamiento a los responsables sanitarios para solicitar la implementación "real" de medidas a corto, medio y largo plazo, que sirvan para "frenar de manera efectiva el progresivo debilitamiento de nuestra Atención Primaria".
Atención hospitalaria
La atención hospitalaria "tampoco se libra de estos problemas estructurales". Los sindicatos han explicado que las UCI están "cada vez más tensionadas" y las cargas de trabajo son "extenuantes", a lo que hay que añadir la escasez de la plantilla y la alta rotación de trabajadores y trabajadoras. Según exponen, buen reflejo de esta situación son los servicios de Urgencias, que acusan un aumento "importante" de la carga de trabajo derivada, precisamente, del "colapso" que se da en la Atención Primaria.
A pesar de lo "alarmante" de la situación, los sindicatos han lamentado que el Gobierno vasco no está dando "pasos para solucionar estos graves problemas" señalados y que la Ley de presupuestos para 2022, recientemente aprobada, contempla una inversión para sanidad que, según han denunciado, supondrá gastar 16 millones de euros menos que lo efectivamente gastado en el ejercicio 2021. Para las centrales sindicales, es "urgente" aumentar el presupuesto de Osakidetza hasta la media de la UE (7% del PIB), así como destinar un 25% del mismo a la atención primaria y reforzar "de manera inmediata" las plantillas.
Asimismo, defienden que hay que dotarlas de recursos humanos "suficientes" en todas las categorías con la creación "miles de plazas para consolidar a los miles de temporales", terminar con la contratación temporal "abusiva" y "racionalizar" las cargas de trabajo.
Amenazan con ir a la huelga
Por todas estas razones, los trabajadores de los centros de atención primaria amenazan con convocar una huelga si no se implantan medidas "inmediatas y reales" para afrontar dicha situación. Asimismo, piden apoyo por parte de la ciudadanía, así como a los diferentes movimiento sociales y organizaciones, porque la sanidad pública "es un seguro de vida colectivo que debemos defender.