La vacunación contra la gripe aumentó un 45% en Euskadi en 2021 en comparación con la campaña del 2019, la última previa a la pandemia del coronavirus. Sin embargo, estos datos son ligeramente inferiores a los del 2020, un año excepcional por el efecto del Covid-19. En todo caso, más de 560.000 vascos han recibido la dosis de protección contra la enfermedad en la última ventana de inoculación, que arrancó el 18 de octubre pasado.
En datos de Osakidetza, este invierno se han administrado 562.840 vacunas contra la gripe, un 45% más que en 2019, pero un 5,4% que en 2020. Con estas cifras, el Departamento de Salud ha destacado la respuesta de los grupos considerados de riesgo, ya que siete de cada diez (73,7%) mayores de 65 años (379.717 personas, en números absolutos) han recibido el pinchazo antigripal.
Menos gripe
Los resultados son “aún mejores” en el caso de las personas que viven en residencias de mayores, donde la cobertura de vacunación contra la gripe ha alcanzado el 86,7%, según el departamento que dirige Gotzone Sagardui. Asimismo, 132.760 mayores de 70 años han seguido las recomendaciones sanitarias y se han vacunado de forma simultánea con la dosis de refuerzo del Covid-19. Finalizada la campaña, continúa el descenso en el número de detecciones del virus de la gripe registradas por el sistema de vigilancia de Euskadi.
La red de vigilancia centinela ha comenzado 2022 registrando una incidencia “excepcionalmente baja por debajo del 5 %”, una situación que se corresponde con la del entorno, ya que la positividad para la gripe en Europa en el arranque de este año ha sido del 6%, “muy por debajo del umbral epidémico establecido en el 10%”.