Más de 500 refugiados de Ucrania están acudiendo al Banco de Alimentos de Gipuzkoa. Esto supone un incremento cercano al 3% en el número de beneficiarios de este servicio en las últimas semanas, una situación que se suma al repunte del 25% de necesitados de esta ayuda registrado en los últimos meses del pasado año.

En concreto, la llegada de refugiados ucranianos a Euskadi ha incrementado el número de beneficiarios del Banco de Alimentos de Gipuzkoa hasta los 22.177 usuarios, frente a los 21.638 de finales del pasado año. Esto es, 539 personas más, según los datos facilitados por la presidenta de la entidad, Belén Méndez de Vigo. Lo ha dicho con motivo de la firma del convenio de colaboración junto al diputado de Medio Ambiente, José Ignacio Asensio, por el que la institución foral aportará 200.000 euros al programa Último minuto, que recogerá alimentos consumibles, pero no comercializables.

Instalaciones del Banco de Alimentos

Contactos con Ucrania

Méndez de Vigo ha subrayado que el Banco de Alimentos registró un periodo de “estabilización” en los meses previos al repunte de finales del 2021. Pero el elevado precio de la energía, unido a la inflación ha incrementado el número de beneficiarios, a los que se suman los refugiados ucranianos.

“En Gipuzkoa existen muchos contactos con Ucrania debido al programa de acogida de niños de Chernóbil, por lo que han llegado muchos refugiados que ya tienen una referencia en el territorio y traen a sus familias, aunque se esperan muchos más”, ha señalado. El Banco de Alimentos ha atendido además con comidas puntuales a refugiados que han pasado por territorio guipuzcoano rumbo a otros destinos.

Llamamiento a la solidaridad

Méndez de Vigo ha hecho un llamamiento a la solidaridad de la sociedad a pesar de que sea este “un momento difícil”. Por ello ha emplazado a participar en la recogida de alimentos que se hará el primer fin de semana de mayo “de nuevo de forma presencial” después de la fórmula de adquisición de bonos que se llevó a cabo durante los años de pandemia.

“Es nuestra seña de identidad. La gente se siente más comprometida si entrega directamente el alimento”, ha indicado.

Alimentos desperdiciados

Mediante el programa Último minuto, puesto en marcha en 2009, se recogieron en 2021 810.000 kilos, lo que supone el 30% del total que gestiona y distribuye el Banco de Alimentos.

Asimismo, Asensio ha indicado que, del total de las 123.000 toneladas de alimentos desperdiciados al año en Gipuzkoa, el 5% corresponde a pérdidas en las cadenas de suministro de las grandes superficies, lo que supone unas 6.000 toneladas.

Menos despilfarro alimentario

Desde el inicio del programa se ha conseguido redistribuir entre las personas más necesitadas 9.200 toneladas de alimentos que de otra forma acabarían en el vertedero, ha señalado. Sin embargo, debido al incremento de concienciación las cadenas de distribución han reducido el despilfarro alimentario y en los tres primeros meses de 2022 el Banco de Alimentos ha recibido un 7% menos de productos frescos por esta vía.

Por ello la organización benéfica trabaja en otras líneas como las empresas de cátering, que ceden directamente las raciones sobrantes a comedores sociales porque no se pueden distribuir, y la línea destinada a recuperar las frutas y verduras producidas por los agricultores y que no tienen cabida en el mercado.