En la víspera del 25º aniversario del asesinato del ertzaina Txema Aguirre a manos de ETA, el lehendakari Urkullu ha publicado un mensaje en redes sociales recordando al agente autonómico asesinado en 1997. Urkullu ha llevado este miércoles su pensamiento "a todas las personas que, de manera directa e indirecta, padecieron el sinsentido de la iniquidad humana" provocada por ETA.
Txema Aguirre fue asesinado de un tiro por la espalda el 13 de octubre de 1997, cuatro días antes de que se inaugurase el museo Guggenheim de Bilbao mientras realizaba tareas de vigilancia junto al museo. El Guggenheim, emblema ahora de la ciudad, era entonces uno de los objetivos de la banda terrorista, que aquel día pretendía colocar en los aledaños del museo maceteros con armas para ejecutar un atentado en el día de la apertura del museo. En concreto, ETA había planificado lanzar granadas contra el museo en la inauguración del que, con el tiempo, se convertiría en el espacio cultural de referencia para los bilbaínos.
En el momento de colocar esos maceteros falsos con armamento, Aguirre interceptó a los terroristas y les pidió la documentación, a lo que los etarras respondieron con un disparo a bocajarro por la espalda que llevó a la muerte del agente 26 horas después de ser atacado. Este jueves se cumplirán 25 años en una jornada que, para Urkullu, será de "faustro recuerdo" por el asesinato de quien ahora da nombre a la explanada que hay junto al Guggenheim.
En su mensaje en redes sociales, Urkullu ha lamentado "la usurpación del nombre de Euskadi" que ejerció ETA durante su historial de décadas de asesinatos, amenazas de extorsión, asesinatos, persecuciones y secuestros. Una etapa de 'socialización del sufrimiento' justificada por la banda terrorista y que influyó en la proyección internacional del País Vasco en opinión del presidente autonómico.