Las inmigraciones crecieron en Euskadi el año pasado más de un 50% hasta situarse cerca de las 60.000. Según datos del Instituto Vasco de Estadística, recogidos por Europa Press, en 2022 hubo 59.194 inmigraciones frente a las 39.427 de 2021, lo que supone un aumento del 50,1%.
Este fuerte aumento de las inmigraciones ha tenido como consecuencia que el saldo migratorio alcance las 22.171 personas, recuperando la senda de crecimientos previa a la pandemia, e incluso incrementando su magnitud, alcanzando el máximo de los años 2000. El saldo migratorio ha seguido una tendencia creciente a lo largo del año: de enero a junio fue positivo en 9.881 personas, mientras que en la segunda mitad del año fueron 12.290.
Por su parte, los emigrantes aumentaron un 3,3% hasta alcanzar los 37.000. De esta forma, el saldo migratorio positivo alcanza el máximo de los años 2000 con 22.171 personas, cifras de la prepandemia. El número de emigraciones también ha aumentado, aunque de forma significativamente menor, pasando de las 35.839 en el año 2021 a 37.023 en 2022, un 3,3%.
Bizkaia presenta el saldo migratorio más elevado
Por territorios históricos, Bizkaia, que ganó 11.818 personas, presentó el saldo migratorio más elevado en cifras absolutas y también relativas (multiplicando por nueve el incremento del año anterior). Gipuzkoa tuvo un saldo positivo de 6.982 personas (8 veces mayor que en 2021) y Álava de 3.371 (2,5 veces mayor que en 2021).
El saldo migratorio es positivo en todas las comarcas de los tres territorios, excepto en Montaña Alavesa, con diez personas menos. En cuanto a las capitales, las tres presentan saldos positivos, con incrementos de 4.529 personas en Bilbao, y de 2.098 y de 2.863 en San Sebastián y Vitoria-Gasteiz, respectivamente.
En relación a los movimientos entre Euskadi y el resto de comunidades autónomas, durante el año 2022 se contabilizó un saldo negativo de 1.154 personas, y ha sido superior al de 2021 (-573 personas). Por el contrario, el saldo con los países extranjeros, positivo en 2021 en 4.161 personas, se ha multiplicado casi por seis, alcanzando las 23.325.
Perfil de los inmigrantes
La edad media de las personas inmigrantes se reduce casi dos años, hasta los 32,5, mientras que la de las personas emigrantes es de 37,3 años. Las personas de 20 a 39 años de edad realizaron el 50% de las inmigraciones y el 47% de las emigraciones. Las diferencias en relación con el sexo se siguen reduciendo: los hombres representan un 51% de los inmigrantes y las mujeres un 49%. De forma similar, hay un 53% de emigrantes hombres, frente a un 47% de mujeres.
El 72% de las personas inmigrantes y el 46% de las emigrantes tenían
nacionalidad extranjera. Las inmigraciones de personas de nacionalidad extranjera fueron 42.499 en el año 2022 y, de ellos, 6.840 vinieron desde otras comunidades autónomas -principalmente desde Madrid, Cataluña y Andalucía- y 35.659 directamente del extranjero.
Las emigraciones de extranjeros ascendieron a 17.153, lo que supuso el 46% del total, el 69% con destino a algún país extranjero. De esta forma, el saldo fue positivo en 25.346.