Si hace dos días los sindicatos anunciaban una jornada más de huelga en Educación, el próximo 24 de octubre, a las dos convocadas para todo el sector público de la Comunidad Autónoma Vasca los díasdías 25 de octubre y 19 de diciembre, para denunciar las condiciones laborales de los trabajadores de la enseñanza pública; este jueves ha sido el turno de los trabajadores de la educación concertada vasca.
ELA, Steilas, CCOO, LAB y UGT han convocado ocho jornadas de huelga los días 17, 18 y 19 de octubre y del 11 al 15 de diciembre en los centros de iniciativa social de Euskadi contra el "bloqueo de la negociación de su convenio y para denunciar el inmovilismo de las patronales del sector, Kristau Eskola y AICE-IZEA", a las que acusan de "falta de voluntad" para iniciar una negociación "real".
Según recoge Europa Press, tras denunciar que Kristau Eskola y AICE-IZEA "siguen enrocadas en su inmovilismo", los sindicatos han subrayado que también "han hecho caso omiso a la petición de negociación que les enviaron antes de aquella huelga". Y así, en un comunicado conjunto, han advertido que, si tras estas jornadas de huelga continúan "sin contenidos que posibiliten la firma del convenio Colectivo, en enero intensificarán la dinámica de huelga".
Bajo este contexto y con dichas peticiones, han emplazado al Gobierno vasco a que, como responsable último del sistema educativo, tome parte "activa" en la resolución de este conflicto, en el que también tiene que decir". Por ese motivo, han anunciado que tienen intención de solicitar una reunión con el Departamento de Educación para trasladarle la actual situación de bloqueo que atraviesa la negociación del nuevo convenio.
En este sentido, han trasladado que, tras la celebración de 13 reuniones con ambas patronales, que comenzaron en mayo de 2022, el último encuentro mantenido entre ambas partes fue el 2 de febrero de 2023, reunión que concluyó entonces "sin fecha para una próxima mesa". Tal y como han lamentado, en aquella última reunión las patronales "dejaron muy clara su intención de no hacer ninguna propuesta sobre contenidos que permitiese avanzar en la negociación del convenio", actitud que les llevó a la huelga del 25 de abril.
Los representantes sindicales han explicado que, desde el inicio del proceso negociador, las patronales no solo tienen la negociación "totalmente bloqueada" sino que, en algunos aspectos plantean "pretensiones de retroceso en derechos ya adquiridos y recogidos en el anterior convenio", firmado en enero de 2020.
9.000 profesores y 120.000 alumnos
Según las estimaciones de los sindicatos, están llamados a secundar los paros en torno a 9.000 trabajadores, que desempeñan su labor en alrededor de 200 centros vascos donde cursan sus estudios 120.000 alumnos. Los sindicatos centran sus principales reivindicaciones en la necesidad de medidas para aliviar las cargas de trabajo, mejoras para los sectores más feminizados y precarizados, subidas salariales que garanticen el IPC, medidas para mantener los puestos de trabajo y mejoras para la Formación Profesional. Igualmente demandan la puesta en marcha de planes de euskera, de igualdad y de abordaje de la salud laboral, especialmente de los riesgos psicosociales que padecen las plantillas.