En Euskadi, así como en sus alrededores, siempre es un buen momento para visitar la naturaleza, ya sea en días lluviosos o soleados. Sea como sea, siempre se ve increíble, pero con el buen tiempo apetece más realizar excursiones. Y es que el territorio vasco cuenta con rincones preciosos que merecen una visita obligada.

Esta Comunidad Autónoma cuenta con un montón de bosques impresionantes, ya que alberga una superficie forestal arbolada del 55%, según el Informe de HAZI Fundazioa sobre el Inventario forestal del País Vasco-2022. Así, la CAV ha demostrado tener, junto a Cataluña y Galicia, la mayor cobertura de bosque de España

Entre los más bonitos se encuentran el Hayedo de Otzarreta, en el Parque Natural de Gorbeia, o el Hayedo del Balgerri y el Karst de Itxina en la provincia de Bizkaia. Pero muy cerca del territorio vasco, en el norte de Navarra en el Pirineo, hay una selva que ha quedado finalista en los Premios de los Lectores de Viaje National Geographic 2024 en la categoría de Mejor Destino Natural de España. 

La Selva de Irati: una de las más importantes

Esta es la Selva de Irati, uno de los hayedos y abetales más grandes de Europa y mejor conservados, según señala la web de Turismo de Navarra en su artículo Selva de Irati: siente la naturaleza, con los valles de Aezkoa y Salazar ocupando la mayor parte del bosque. Los que menos ocupan son los valles francedes de Soule y Cize. Se trata de un tesoro muy preciado que sigue en pie en Navarra, pese a su explotación desde el siglo XV, debido a los ciudadanos que lo cuidan.

Una selva mágica llena de colores que cambian en función de la estación del año y llena de paisajes de ensueño a la que llegar a través de preciosos senderos. Imprescindible para los amantes de la naturaleza y los que disfrutan de la tranquilidad y del silencio. Además se puede llegar hasta la Cascada del Cubo, que es una de las cascadas más preciosas e importantes de la zona

La Selva de Irati en otoño. iStock

Hay de todo, desde robles, abetos y abedules hasta hayas, sauces, helechos y musgos, entre otros. Entre la naturaleza se esconden diferentes tipos de animales, como corzos, ciervos, jabalíes y otros. Así como pájaros carpinteros, picos dorsiblancos y pitos negros o el quebrantahuesos, el halcón peregrino y el águila real, ya que es una zona de Especial Protección de Avifauna. 

Su conservación y biodiversidad se debe a que la selva cuenta con tres zonas protegidas, como las reservas naturales de Mendilatz y de Tristuibartea y la integral de Lizardoia

Una de las mejores rutas para descubrir esta hermosa selva es la del valle de Aezkoa desde el sur hasta el norte, que atraviesa por completo la Selva de Irati. Comienza en la localidad de Aribe después de cruzar el río Irati por un puente colgante y uno medieval. Continúa hacia el norte pasando cerca de la Reserva Natural de Tristuibartea antes de alcanzar el puente de Beotegi y adentrarse en el municipio de Orbara. Al final hay que atravesar el pueblo de Orbaizeta.