Euskadi es una Comunidad Autónoma que, pese a su tiempo lluvioso, desprende muchísima calidad y felicidad, muy ligadas a la belleza natural. Bilbao se coronó el año pasado como la ciudad más feliz de España y este año es la segunda más feliz del Estado por detrás de Vigo (Galicia) según el estudio Happy City Index #2024 del Institute for Quality Life expone, que se basa en criterios como el medio ambiente, zonas verdes, el compromiso con el bienestar de sus habitantes, la política, la educación, la movilidad y la economía, entre otros.
La calidad también se aprecia en su capital, Vitoria-Gasteiz, que fue reconocida como la Green Capital de España, reconocimiento concedido por la Unión Europea por apostar por la calidad de vida de sus ciudadanos, por la movilidad sostenible, zonas verdes, política de servicios, turismo sostenible, economía circular y el deporte o la salud. Así como en Gautegiz-Arteaga, el pueblo más feliz de Euskadi el año pasado por su biodiversidad y ubicado en la Reserva de la Biosfera de Urdaibai. Una de las conclusiones a las que llegaron los investigadores de la Universidad de Kiel en el estudio europeo Ecological Economics es que mirar a los pájaros aporta felicidad.
Zarautz: el pueblo que desprende felicidad
Este año, ese puesto se lo ha quitado el pueblo de Zarautz, en Gipuzkoa. Así lo ha demostrado un estudio llevado a cabo por la empresa de datos y opinión YouGov, junto con la empresa Azucarera. Entre los 35 pueblos de España con mayor felicidad, la localidad vasca se ubica en el puesto número 28 por su belleza, gastronomía y entorno natural.
Este municipio, rodeado del Cantábrico y que fusiona la tranquilidad con la modernidad y se encuentra ubicado en la comarca de Urola Kosta, posee decenas de atractivos con los que cautivar a todos. La villa, según la web de Turismo Euskadi del Gobierno Vasco alberga un casco histórico "desde el punto de vista artístico y arquitectónico, además de un entorno natural de excepción".
Una zona llena de edificios y monumentos de interés con un gran "valor arquitectónico". Así, destacan la iglesia de Santa María la Real, el palacio de Narros, Torre luzea, los conventos de los Padres Franciscanos y las Clarisas, la casa torre de los Zarauz, la casa Dotorekua y la casa Portu, que es el ayuntamiento.
Su playa de 2.500 metros se encuentra rodeada de los acantilados de Santa Bárbara y Mollarri y de un precioso paseo lleno de cafeterías y terrazas tradicionales basadas en la cocina vasca y pintxos típicos de la zona. "La inconfundible imagen de los toldos de colorines y su fina arena dorada la convierten en uno de los arenales más bonitos de la costa vasca". Una playa ideal para los surfistas.
Además, cerca del río Iñurritza se halla una zona de dunas, "la más extensa del litoral guipuzcoano" y perfecta para aquellos que quieran empaparse de la belleza natural. "Declarado biotopo protegido, una pasarela nos permite visitar este espacio natural que sirve de cobijo a muchas especies de aves".
Además de la increíble gastronomía vasca que se puede degustar en el restaurante Karlos Arguiñano. Una cocina local basada en el pescado, que es "la base de los platos típicos zarauztarras". No hay que dejar de lado los productos de los caseríos o baserris más cercanos, como el Txakoli o el vino blanco con denominación de origen.