Euskadi es sinónimo de naturaleza. En el territorio se hallan montes, bosques, senderos y ríos preciosos, pero también hermosas playas. Las más famosas son las de La Concha, en Donostia, y la de Plentzia o la de Lekeitio, en Bizkaia. Sin embargo, estas no son las que han obtenido una Bandera Azul este año.
Cada año se reconocen las mejores playas de España con un distintivo azul para señalar el buen nivel de los servicios de las playas, el buen estado del agua y la seguridad. Este año son 638 playas españolas las que tienen un distintivo azul, según los datos de la Asociación de Educación Ambiental y del Consumidor (Adeac). Unas distinciones que se hallan en 52 países.
España es el líder en playas con Bandera Azul desde 1994 a nivel mundial, ya que es el país con más banderas en el mundo. Le siguen Grecia y Turquía. Cada una de estas banderas se encuentran repartidas por diferentes comunidades autónomas y en Euskadi son cuatro playas las galardonadas este año. La mayoría, tres, se encuentran en la provincia de Álava. Estas son la de Arratzua-Ubarrundia, Barrundia y Elburgo. Mientras que una de ellas, la de Bakio, se ubica en Bizkaia.
Sopelana: la playa más bonita de Bizkaia
Sin embargo, la más bonita de la provincia la recoge el municipio de Sopelana, un pequeño pueblo en la comarca de Plentzia-Mungia o Uribe, con muchas décadas de historia y con casi 14.000 vecinos. Cuenta con cuatro increíbles playas: Barinatxe o La Salvaje, Arrietara, Atxabiribil y Meñakoz.
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Cada una de ellas con su propio encanto. Son perfectas para practicar el surf. Barinatxe o La Salvaje es la más famosa, situada entre los municipios de Sopela y Getxo. Cuenta con 750 metros de largo y con mucha tranquilidad, además de un entorno natural precioso, según la web de Turismo Vasco en su artículo Playas de Sopela, información y consejos.
La playa de Arrietarra es muy popular entre los surfistas y en ella se pueden alquilar tablas. A la de Atxabiribil, por otra parte, se le conoce como la playa Sopelana y es la segunda más conocida. Mide más que La Salvaje y atrae a los surfistas por sus olas. En esta se puede jugar, asimismo, al voleibol de playa. La de Meñakoz es, en cambio, un pequeño secreto. Es la más tranquila de todas y la elegida por los surfistas profesionales debido a sus grandes olas. A diferencia de las demás, esta no es muy recomendable para el baño.
Además, para quienes deseen disfrutar de otro tipo de actividades en plena naturaleza, Sopela ofrece unos montes en los que se puede encontrar el Cinturón de Hierro, mucha historia cultural y una buena gastronomía.