Fermín Muguruza responde a Imanol Pradales después de que este miércoles el lehendakari haya dicho que, si el que fuera vocalista del grupo 'Kortatu' quiere hablar de convivencia y memoria, tiene abiertas las puertas de Lehendakaritza.
Tras esta invitación, el cantante ha invitado a Pradales, a asistir al concierto que celebrará en Anoeta el próximo mes de junio, donde, según ha asegurado, "25.000 gargantas cantarán tan alto 'Sarri, Sarri'" que se podrá escuchar en la cárcel de Martutene, en alusión a la canción que recuerda la fuga de dos presos de ETA de la prisión en 1985.
Y es que el cantante actuó el pasado sábado en la cárcel de Martutene y, entre su repertorio, cantó la canción de 'Sarri, Sarri', que relata la huida del penal de los miembros de ETA Joseba Sarrionandia e Iñaki Pikabea, lo que provocó las críticas de víctimas.
Ante ello, el Departamento de Justicia y Derechos Humanos del Gobierno Vasco, dirigido por la socialista María Jesús San José, anunció que se exigiría para tocar en las cárceles repertorios de canciones acordes al respeto a los derechos humanos y a todas las víctimas, así como a los principios de reinserción.
Tras ello, Fermín Muguruza mostró su "sorpresa y desilusión" ante lo que consideró un "paso atrás" en la postura mantenida por el Gobierno Vasco y afirmó que le gustaría saber la opinión de Pradales.
Por su parte, el Lehendakari, que se encontraba en Bruselas de visita oficial, manifestó que, si Muguruza quiere que hablen de convivencia y de memoria, tiene las puertas de la Lehendakaritza abiertas para tener una conversación "sincera y honesta en relación con esta cuestión".
En respuesta, el cantante ha invitado a Imanol Pradales a acudir a su concierto de junio en Anoeta. "Cantaremos tan alto 'Sarri, Sarri' que intentaremos que la canción traspase el estadio de Anoeta y llegue hasta Martutene"", ha asegurado.
Muguruza añade, en su texto, que considera "difícil" dialogar de "forma honesta" en el Palacio de Ajuria Enea con el Imanol Pradales, ya que está de acuerdo con la decisión del Departamento de Justicia y con que se sugiera que no respeta los derechos humanos. En todo caso, acepta la invitación porque, según ha apuntado, lleva "muchos años" intentando "construir puentes".