Idoia, vecina de Lekeitio de 27 años, sobre la vivienda: “Comparto piso y pago 400 euros al mes, no es muy accesible"

Tener más de 25 años y no poder independizarse es una problemática que viven muchos jóvenes vascos hoy día. La media de edad para emanciparse en Euskadi se sitúa en los 29,8 años, tres años y medio más que la media europea (que se sitúa en los 26,2 años). Lo confirma el Observatorio Vasco de la Juventud en el informe Claves de la Emancipación en Euskadi. 

Hoy son poco más de 58.000 jóvenes de entre 18 y 34 años con ingresos que aseguran que necesitan un lugar en el que vivir y la media de edad de 29,8 años se debe a varios factores: los sueldos, la prolongación de los estudios, las condiciones laborales y el coste de la vivienda dificultan la adquisición de un hogar. Una de las afectadas es Idoia, fisioterapeuta y vecina de Lekeitio de 27 años. 

Emancipación complicada

Idoia ha confirmado para el Teleberri de EITB que, en la actualidad, sigue compartiendo después de siete años. Ahora, lo comparte con cinco personas y paga 390 euros al mes: "Todas somos trabajadoras, de hecho, soy la más joven". 

"Intentamos encontrar a buen precio, pero la verdad es que la vivienda no está muy accesible". Lo de poder alquilar ella sola todavía no lo ve posible: "Los precios están desorbitados y para vivir dos personas, aparte de que no hay viviendas para eso, es inaccesible". 

Lo mismo les ocurre a los vecinos Javier, profesor de 28 años, que paga 420 euros de alquiler, y a Bertha, ingeniera química que paga 425 euros por habitación en Bilbao. "Algo decente en Deusto estaba por 420 euros al mes, tengo la suerte de poder irme a vivir con un amigo cuando reforme su casa", apunta para el medio. 

Bertha coincide con Javi en el precio de los alquileres: "Lo más decente que vi estaba en los 450 euros mínimo, todavía estoy compartiendo piso, primero me gustaría irme yo sola y luego ya poder independizarme comprando una casa es algo que ahora mismo no veo claro". 

Entre los jóvenes emancipados, la mayoría de los menores de 30 años viven de alquiler y un 60,8% de entre 18 y 34 años vive con su pareja, según el mencionado informe. Pese al aumento del salario medio en Euskadi para los jóvenes de entre 18 y 34 años, que se sitúa en los 1.564 euros netos mensuales con las pagas extra, la vida sigue inestable y los precios no dejan de aumentar. 

Aunque se haya dado un aumento de la tasa de ocupación juvenil de 2015 a 2025 y haya descendido la tasa de paro, los jóvenes de entre 16 y 29 años trabajan a tiempo parcial (un 32,2%) y el 40% cuenta con contrato temporal, lo que desciende a partir de los 30 años. 

Con todo, si un joven asalariado de entre 18 y 34 años quisiera conseguir una vivienda mediante préstamo hipotecario, tendría que destinar el 64,2 % de su salario neto mensual al pago de la primera cuota de la hipoteca. Una cifra que duplica el límite máximo de endeudamiento que las entidades sitúan en un 30% (sobre el sueldo mensual) para valorar la concesión de un crédito.

En cambio, los jóvenes de este mismo rango de edad que optasen por el alquiler, tendrían que destinar el 52,4% de su sueldo neto (en el caso de querer vivir ellos solos). Motivo por el que buscan distintas maneras para acceder a la vivienda, como el programa Emantzipa, que ha superado las 9.000 solicitudes en año y medio, según el observatorio.