Jon es un vecino vizcaíno que lleva tres años trabajados en la misma empresa como ingeniero mecánico. Cobra entre 34.000 y 36.000 euros brutos al año, que es lo básico que cobra un jefe de obras, según dicta el convenio del metal. Sin embargo, no puede esperar para opositar.
Como muchos jóvenes españoles, busca estabilidad laboral, algo que, las empresas privadas no suelen ofrecer. "El principal motivo por el que querría opositar es por mi incertidumbre", confiesa a CRÓNICA VASCA. "Yo manejo mal la incertidumbre y, a día de hoy, aunque tenga un contrato indefinido, en una empresa privada nadie te quita que si las cosas van mal o la situación cambia te pueden echar a la calle".
Solución ante la incertidumbre
En cambio, si uno oposita, continúa Jon, "puede estar de un lado para otro cierto tiempo, pero acabará encontrando un puesto fijo en algún sitio". Solo hace falta ir a un banco: "Si ven que la nómina viene del Gobierno Vasco, te abren la puerta".
"Encontrar en el sector privado algo fijo que te vaya a durar es complicado, entonces, tiene su ventaja y su desventaja, la ventaja es que si te cansas te puedes ir", subraya. Aunque opositando no vaya a conseguir más dinero del que gana en la actualidad, valora las ventajas de opositar porque antepone la "estabilidad a la cantidad".
En su actual empresa mantiene una carga de trabajo alta, que es lo que "más" le puede: "Al final los recursos son limitados y se busca la mayor eficacia y un gasto mínimo, entonces al final te cargan con más trabajo o con más responsabilidad".
Siendo funcionario, el joven vizcaíno siente que cada uno tiene su responsabilidad, su puesto y sus quehaceres fijos. "En cuanto al tema económico no tengo mucha queja, es cierto que el coste de vida ha subido y el sueldo se ha mantenido igual", responde tras ser preguntado por el sueldo.
Aunque de vez en cuando le entra el miedo como a muchos jóvenes. Nota que el día de mañana, no le llegará para vivir cuando se jubile. "Yo calculo que cobraré 1.500 euros o 1.600 de pensión, pero si el ritmo es como el de ahora y no tengo el piso pagado va a estar muy complicado".
Un trabajo valorado
Tal y como señala el informe Mercado de trabajo en la ocupación de ingeniero de Randstad Research con el Instituto Nacional de Estadística (INE), en Euskadi existen más de 36.000 ingenieros, lo que posiciona al territorio vasco en el cuarto puesto de las comunidades autónomas con mayor número de trabajadores en este sector. Así, la región registra 1 de cada 10 ingenieros, el 9,4% del total.
En cuanto a los Ingenieros Superiores, Euskadi registra 32.431 trabajadores, lo que supone el 10,6% de profesionales españoles. Madrid, de nuevo, se mantiene en el primer lugar con un 25% y a esta comunidad le siguen Cataluña con un 20,8% de ingenieros y Andalucía con un 10,6%. Con respecto a los Ingenieros Técnicos, Euskadi no tiene mucho, estos representan el 4,8% del total.
Se trata de un trabajo cada vez más demandado, pues ha percibido un incremento interanual del 13%, según Europa Press. Este aumento muestra el interés por los perfiles con especialidad. Además, refleja la necesidad de cubrir las nuevas demandas del mercado de trabajo.
