Marisa Castro, vecina vasca, decepcionada sobre la inaccesibilidad de la línea C3: "Veo todos los días pasar unos trenes que no puedo coger"

La línea C3 de Renfe, que conecta Bilbao con Orduña, sigue sin ser totalmente accesible para todos, una situación que los usuarios llevan denunciando desde hace años. La falta de accesibilidad a estaciones y vagones, entre la escasez de frecuencias y horarios ajustados a las necesidades de los vecinos vascos, así como la falta de información en tiempo real y la instalación de los apantallamientos han sido los motivos por los que decenas de personas se han concentrado este miércoles en la estación de San Miguel, en Basauri (Bizkaia). 

La vecina bilbaína, Marisa Castro, ha acudido hasta San Miguel para luchar para mostrar su apoyo a los vecinos en la concentración convocada por Sagarrak Ekologista Taldea, Biziz Bizi, ConBici y la Asociación de Vecinos de San Miguel de Basauri. Lo ha hecho en bus, porque en tren "es imposible", ha asegurado a Deia en su artículo "Vivo frente a la estación de Renfe viendo todos los días pasar trenes que no puedo coger".

Inaccesibilidad para muchos

Castro reside actualmente frente a la estación de Abando, en Bilbao, y lamenta que no hace más que ver pasar, cada día, "unos trenes que no puedo coger". El servicio ferroviario no ofrece los servicios que los vecinos necesitan y ha aclarado que los dos principales problemas para las personas con movilidad reducida son los ascensores que no funcionan y "la distancia entre el andén y los vagones que, especialmente, en la línea C3 es insalvable".

Así, este medio de transporte no puede ser usado por Marisa incluso para ir a ver a sus amigos a Basauri o de Arrigorriaga. Manifiesta que la accesibilidad universal debe ser un "derecho que, en este caso, las administraciones públicas están negando".

La consejera de Movilidad Sostenible, Susana García Chueca, anunció un plan el pasado mes de octubre con el objetivo de abordar la falta de accesibilidad en la línea ferroviaria y con el que, a principios de 2026, se probará un recrecido parcial de los andenes en las cabeceras de línea, según el Gobierno Vasco. 

El proyecto prevé la creación de recrecidos parciales en algunos tramos de los andenes para que queden a la misma altura que los trenes y eliminar el desnivel salvar en la C3. La solución, como avanzó Chueca, se probará primero en las estaciones de inicio y final del recorrido, Orduña y Abando y los trabajos e los andenes se realizarán en el primer trimestre de 2026. 

Aunque la actuación se centra en los andenes, algunos usuarios critican que todavía "no han dicho nada sobre cómo se van a salvar los escalones que hay en las puertas de los vagones", recoge Deia.