Localidades de portada cerca de Euskadi hay muchas, como Elizondo (Navarra), Haro (en La Rioja) o Santoña (en Cantabria), pero ninguna se compara con la mágica y cántabra que "no es santa ni llana ni tiene mar", Santillana del Mar.
Un pueblo medieval considerado uno de los más bonitos del Estado y que se hizo con el corazón de los escritores Jean-Paul Sartre y Simone de Beauvoir, y que sigue cautivando con su belleza a cada turista que la pisa.
Un paraíso que sigue enamorando
La pareja pasó por Santillana del Mar en la década de los 30 y todavía el pueblo hoy guarda su esencia medieval con antiguas casas de piedra y madera. Declarada Conjunto Histórico Artístico en el año 1889, Santillana está marcada por un gran patrimonio artístico y cultural, como sus casas o palacios, entre otros.
La villa mantiene hoy, según la web oficial de Santillana del Mar Turismo, una "excelente conservación de sus casones, su colegiata y sus numerosos palacios", como la Colegiata de Santa Juliana, la Ermita de Santa Ana, el Palacio de Velarde, el Palacio de Mijares, el Palacio de los Quirós, la Casa del Águila y la Parra o la Torre de Don Borja, entre otros.
Uno de los más destacables de todos estos es la Colegiata de Santa Juliana, en el corazón de Santillana, ya que la villa se construyó alrededor de ella, tal y como señala la revista cultural de National Geographic en su artículo Santillana del Mar, el pueblo de Cantabria que conmocionó a Jean-Paul Sartre.
Todavía mantiene sus muros del siglo XII, que "custodian los restos del mártir que dio nombre al pueblo". Sobresale, de su estructura, la iglesia de estilo románico influido por las "corrientes del sur que llegaron con el Camino de Santiago". Se contempla a la perfección desde el lavadero público de enfrente.
La Colegiata, Patrimonio de la Humanidad y Monumento Nacional en 1889, requiere ser contemplada con mimo y es su claustro el que atrapa a los turistas.
Como apunta Santillana del Mar Turismo, su "inmejorable" situación geográfica, además, hacen de este rincón de más de 3.500 vecinos un "lugar cercano y, al mismo tiempo, alejado de todo en el que evadirse disfrutando del paisaje, sus gentes, su historia y su amplia agenda cultural".
La villa hoy sigue evolucionando y cuenta con una extensa agenda cultural que la vuelven uno de los "referentes culturales" de toda Cantabria. "Una villa abierta a todos, cada día y cada hora del año, una villa moderna y actual, de ocio, de arte, de turismo y preparada para un futuro prometedor
Un rincón envuelto en verde que es imprescindible visitar esta Navidad, ya que contará con uno de los mercados navideños más bonitos de Europa, según National Geographic, y está marcada por una de las mejores cuevas de España, la de Altamira.
A pocos kilómetros de Santillana del Mar se halla este Louvre español, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1985, con pinturas que datan de entre 35.000 y 11.000 años antes de Cristo. Sobresale por sus obras rupestres del Paleolítico Superior y sus figuras de caballos, bisontes u otros animales.
Como detalla el Ministerio de Cultura, Altamira, precisamente, cuenta con el privilegio de ser el primer lugar del mundo en el que se halló la existencia del Arte Rupestre del Paleolítico superior y, además, "fue un descubrimiento singular por la calidad, la frescura y la magnífica conservación de sus pigmentos".