Los días previos a la Lotería de Navidad y la de El Niño son los más intensos del año. Decenas de administraciones de Euskadi se ponen manos a la obra para vender todos los números posibles, días en los que los clientes rezan a la suerte.
Responden en las colas a las preguntas del millón antes de adquirir un décimo: ¿en qué te gastarías El Gordo y en cuánto tiempo? Los guipuzcoanos lo tienen claro. "Uno de cada cinco se lo gastaría en menos de un año", según ha confirmado el investigador Luis Rodríguez, de Research Frontier, a CRÓNICA VASCA.
Un premio aprovechado
El coste de vida en Gipuzkoa es alto, por ello muchos apuesta por la suerte para conseguir dinero y ponen toda su confianza en las loterías de Navidad y de El Niño. Tal y como apunta el estudio realizado por una marca de entretenimiento a 10.000 participantes del Sorteo Extraordinario, el 21% de los guipuzcoanos confirma que gastaría el premio, si le tocase, en menos de un año.
En cambio, un 9,6% piensa que podría vivir de su premio durante el resto de su vida. El 23,1% opina que el dinero le duraría entre uno y cuatro años, mientras que el 32,7% cree que podría extenderse una década al menos. Además, los guipuzcoanos, de media, prevén gastar el 25,5% del premio antes de finalizar enero. De esta manera, Gipuzkoa se ubica entre las provincias con el porcentaje más alto.
Con respecto a lo que destinarían el dinero, las prioridades están definidas: un 87,9% ayudaría económicamente a familiares y a amigos. Así, Gipuzkoa se posiciona como la comunidad más generosa. Por su parte, el 75% de ciudadanos destinarían el premio al ahorro.
El 55,8% lo gastaría en comprar o mejorar su hogar y el 44,9% lo guardaría para tomarse un año sabático, mientras que un 37,5% lo usaría para pagar deudas y el 36,6% lo destinaría a comprar una vivienda para alquilar.
En cuanto al trabajo, el 35,6% asegura que reduciría su jornada o que dejaría su trabajo de manera temporal y el 25% gastaría el premio en emprendimiento o en formación para cambiar de trabajo. Un 1,3% no sabría a qué destinar el dinero.
A la hora de participar en los sorteos, Gipuzkoa se encuentra entre las provincias con mayor nivel de influencia (media de 3,5 sobre 5 puntos) y una de las mayores con FOMO (Fear of Missing Out o 'miedo a quedarse fuera' mientras otros participan). De esta manera, los guipuzcoanos juegan movimos por la ilusión y la presión del entorno.
El origen de esa presión deriva del trabajo, ya que el 51,1% compra décimos por compromiso, mientras que el 44,9% señala a su familia y el 21% a amigos como los responsables de quienes les animan a comprar o a participar.