Seis personas han muerto, dos de ellas de Bizkaia, y otras tres han resultado heridas de gravedad al arrollar un camión un control contra el narcotráfico montado por el instituto armado en la autopista AP-4, a la altura de la localidad sevillana de Los Palacios.
El siniestro, cuyas causas, según las primeras hipótesis de la Guardia Civil, son accidentales, ocurrió pasadas las cuatro y media de la madrugada, cuando un camión articulado colisionó contra varios vehículos que se encontraban en un control que estaban llevando a cabo agentes del Grupo de Acción Rápida (GAR).
En el suceso han muerto dos vascos. Uno de ellos es el agente de la Benemérita Eneko Lira Gómez, de 36 años y natural de Barakaldo, que mañana iba a cumplir los 37. El otro vasco muerto es un joven residente en Bizkaia de 20 años y que estaba en el interior de uno de los coches parados en el control. Al parecer, el conductor del camión, al recibir señales de los agentes, maniobró bruscamente desviándose hacia el arcén y arrollando a los tres primeros vehículos del GAR y a otros turismos que estaban dentro del dispositivo.
El conductor, de 59 años, que ha resultado ileso al igual que su acompañante, de 36, ha dado negativo en las pruebas de alcohol y drogas, y ha sido detenido por seis presuntos delitos de homicidio por imprudencia y tres de lesiones graves por imprudencia. Además del guardia civil vasco ha muerto otro agente del cuerpo, Juan Jesús López Álvarez, de 34 años y nacido en El Ejido (Almería), según fuentes del instituto armado. Estos dos guardias civiles muertos y otros tres compañeros heridos estaban desplegados en Vitoria, donde el GAR tiene una base, aunque en la actualidad estaban comisionados en Sevilla.
Los guardias civiles arrollados en la AP-4 realizaban un control habitual contra el narco/EFE/ Jose Manuel Vidal
4 muertos en los coches parados en el control
Los otros cuatro fallecidos se encontraban dentro de tres turismos particulares parados en el control, según ha explicado a los periodistas en el lugar del accidente el comandante en jefe del subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Sevilla, Rafael Jiménez. Eran un vecino de Dos Hermanas (Sevilla), de 47 años; uno de Barbate (Cádiz) de 50 y uno de Ceuta de 53, además del citado joven de Bizkaia.
Además, hay cinco heridos, tres de ellos graves que son guardias civiles. Uno fue evacuado muy grave al Hospital Virgen del Rocío de Sevilla, con un neumotórax bilateral y otros traumatismos; y los otros dos al Hospital de Valme, uno de ellos con una fractura en una pierna, y el otro con una fractura de fémur y lesiones en hígado y páncreas, según ha informado.
Mientras se investigan las causas, se descarta en principio que el atropello haya sido intencionado y la Dirección General de Tráfico apunta a la somnolencia del conductor del camión, que transportaba frutas y hortalizas, o a otra distracción como la causa principal. Los dos agentes fallecidos y sus tres compañeros heridos formaban parte de un despliegue de su unidad para combatir el narcotráfico en el sur y estaban realizando un control aleatorio en esa zona de la autopista, en un operativo habitual.
Fuentes del instituto armado han indicado a EFE que los vehículos ocupados por civiles y que también han sido arrollados con el resultado de cuatro muertos, habían sido interceptados de forma aleatoria. Las asociaciones de guardias civiles han apuntado que la muerte de los dos agentes vuelve a constatar la necesidad de que su trabajo sea declarado como una profesión de riesgo.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, han expresado en las redes sociales sus condolencias a los familiares de las víctimas, mientras en El Ejido, de donde era uno de los agentes muertos, se ha guardado un minuto de silencio y el Ayuntamiento ha decretado un día de luto.