La alcaldesa de Vitoria-Gasteiz, Maider Etxebarria
La huelga de los jardineros de Vitoria: un conflicto sin solución a la vista
Los ciudadanos de la capital vasca sufren los efectos de una huelga enquistada tras más de cuatro meses de conflicto
Más información: Los jardineros de Vitoria piden al Ayuntamiento que ponga fin al contrato con Enviser
26 de marzo. Es la fecha hasta la que hay que remontarse para comprender un conflicto que pesa sobre los vecinos y vecinas de Vitoria. Ese día, los jardineros subcontratados por el Ayuntamiento anunciaron el inicio de una huelga indefinida que aún se mantiene.
Tras cinco reuniones fallidas en el Preco, los trabajadores de Enviser —la empresa adjudicataria— han lanzado una nueva petición: que el Ayuntamiento de Vitoria rescinda el contrato, vigente hasta diciembre de 2027.
El problema: la Ley de Contratos impide al Ayuntamiento poner fin al acuerdo sin acuerdo por ambas partes. Si el Consistorio dirigido por Maider Etxebarria lo hiciera sin el consentimiento de la empresa, esta podría plantear una demanda.
Sea cual sea el desenlace, lo cierto es que, tras más de cuatro meses de huelga y en pleno periodo estival —cuando las consecuencias son aún más notables—, Vitoria empieza a no ser tan limpia ni ordenada. Y si hay una institución que tiene capacidad para desbloquearlo, es el Ayuntamiento.
Lo que no puede permitirse es que la ciudadanía siga sufriendo las consecuencias de un conflicto que pesa en la higiene de la ciudad y en la salud de los ciudadanos de Vitoria.
