El Gobierno vasco acudirá a deuda hasta el año 2023 para empujar la inversión pública

El Gobierno vasco acudirá a deuda en 2022 para mantener una importante capacidad de gasto. Supondrá, por lo tanto, tres ejercicios consecutivos de endeudamiento para hacer frente a las consecuencias de la crisis económica y para hacer palanca en la recuperación. Así lo acaba de anunciar el consejero de Economía y Hacienda del Ejecutivo, Pedro Azpiazu, en la presentación de las directrices económicas que guiarán la elaboración de los presupuestos de la comunidad autónoma el año que viene. 

Azpiazu ha defendido la necesidad de aprovechar una "oportunidad sin precedentes" para "maximizar la inversión pública" hasta 2023. El Gobierno abraza por lo tanto las políticas expansivas del gasto público para que, junto a la llegada de los Fondos Europeos, pueda activar un "ambicioso plan de inversiones" que impulse la recuperación y la transformación de la tecnología energética, la movilidad y la sostenibilidad. Y es que, según ha explicado Azpiazu, la caída de la economía en 2020 con un 9,5% del PIB no tiene precedentes por lo que "debemos afrontar las consecuencias de la covid-19". 

En 2023 vuelta a la senda de la "austeridad presupuestaria"

La posibilidad de acudir a la deuda se habilitó en 2020, cuando en plena pandemia la Comisión Europea decidió suspender temporalmente los criterios de estabilidad presupuestaria para permitir el endeudamiento de las administraciones. Se trata de una medida que se mantendrá hasta 2023 y que para el Gobierno vasco supone una oportunidad que seguir aprovechando para buscar el máximo efecto sobre la economía aglutinando el efecto del gasto público y de la llegada de los Fondos Europeos. A partir de 2023, según ha explicado Azpiazu, "es previsible que las excepciones de Europa ya no estén y que haya que volver a la normalidad". 

Reclamación de la reunión de la Comisión Mixta de Concierto

El Gobierno vasco, por lo tanto, contempla en las directrices para elaborar las cuentas de 2022 con apoyarse en el endeudamiento. La cuantía deberá acordarla con en la Comisión Mixta de Concierto con el Ejecutivo central. En este sentido, el consejero Azpiazu ha "lamentado" que la reunión de ese foro no haya tenido lugar para tratar esta cuestión, para también el de establecer el mecanismo para que en Euskadi se recauden los nuevos impuestos referidos al comercio online y a la compra de acciones, las conocidas como ´tasa google´ y ´tasa tobin´. 

El calendario del Gobierno es comenzar a preparar en cada departamento el proyecto de presupuestos para el próximo mes de octubre. Unas cuentas en las que, por segundo año consecutivo, se tendrá la perspectiva de género en un eje transversal a todas las carteras del Gobierno que deberán medir el impacto en este área de sus respectivas políticas. 

Síntomas de recuperación en el segundo trimestre

En cuanto a las previsiones económicas, Azpiazu ha señalado que en este "segundo trimestre del año apunta señales claras de recuperación por los datos del empleo, de la producción industrial y las exportaciones". Unos datos que permiten prever el cumplimiento de las previsiones de crecimiento para este año con un 6,7% y con un 5,7% para el 2022, que es el dato con el se preparan las cuentas del Gobierno vasco. 

Aumento de la deuda viva en un 44%

En cualquier caso, el recurso a la deuda para hacer frente a los gastos necesarios para afrontar la pandemia están empezando a lastrar las cuentas públicas, unido a la caída de la recaudación, elevarán la deuda de Euskadi en sólo dos años en un 44%. Pasando de los 8.976 millones de euros de deuda viva con los que comenzó 2020 a los cerca de 13.000 millones con los que terminará el 2021.