Las bodegas esperan la decisión sobre 'Viñedos de Álava' envueltas entre el "miedo y el secretismo"

Años de planteamientos y conversaciones y meses de análisis. Eso es lo que hay detrás de 'Viñedos de Álava'. La posibilidad de crear esta nueva denominación tiene divididas a las bodegas, a la opinión pública y también a la política. La última novedad saltaba hace apenas unos días cuando el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación transmitía la solicitud de inscripción del pliego de condiciones de esta Denominación de Origen Protegida a la Comisión Europea. Así, el debate sobre el futuro de 'Viñedos de Álava se traladaba al plano europeo, que será quien tenga la última palabra.

Dicho informe fue elaborado por la junta directiva de ABRA, propulsora de esta idea, y cuenta con el aval del Gobierno vasco para que sea una realidad. El objetivo de esta iniciativa es el de crear una nueva denominación fuera del paraguas de Rioja. Desde su llegada a Bruselas, la marca 'Viñedos de Álava' ya está protegida y ya no podrá registrarse otra marca con dicho nombre. Ahora, falta saber su decisión sobre la creación, o no, de dicha denominación.

Ninguna bodega ha planteado una propuesta por el momento 

Mientras tanto, donde si podrán comercializarse vinos bajo este sello será en el territorio nacional. Y es que, el Gobierno vasco, previa consesión de la Protección Nacional Transitoria, ha asegurafo que no va a poner ninguna objeción a que las empresas vascas del sector decidan etiquetarse con esta marca. "Si hay un grupo de bodegas que estime interesante poder acogerse a esa denominación, nosotros le daremos la oportunidad de hacerlo", afirmaba la consejera Arantxa Tapia. Algo previsible ya que dicho proyecto ha contado siempre con el aval del Ejecutivo. A pesar de ello, desde el departamento aseguran que por el momento no han recibido ninguna solicitud. 

Sin embargo, los propios bodegueros aseguran que esta no sería una opción tan sencilla en la práctica, ya que implicaría empezar de cero con todo. Ignacio Gil, gerente de Bodegas Mitarte, ha mostrado siempre su clara oposición al "sin sentido" de la nueva denominación porque cree que supone un paso para atrás. "Si quiere irse, que se vayan, pero no es algo tan sencillo y todos los saben y por eso realmente no se quieren marchar. Yo nunca ha respaldado esto, y lo digo sin miedo a las represalias. Cada uno que pelee por su marca, pero si te vas, te vas con todo", explica Gil. 

Tal y como él explica, en una bodega que ya está en marcha solo se puede elaborar y embotellar la denominación y los caldos para los que tengan los permisos pertinentes. Si el Consejo Regular se percata de alguna anomalía, podría llegar una multa y al segundo aviso, la expulsión de dicha bodega de la denominación. Por lo tanto, quien quiera fabricar su vino bajo 'Viñedos de Álava' tendría que partir absolutamente desde cero, y además, sin la garantía de que de aquí a que llegue la decisión de Bruselas esta de luz verde. 

Clima de "miedo y secretismo" entre las bodegas

Toda esta situación lleva mucho tiempo generando un clima de "crispación", "discrepancias" e incluso "miedo" dentro del conjunto de las bodegas. La realidad es que nunca se ha sabido quienes son las que conjugan esta iniciativa con ABRA, e Ignacio Gil asegura que " de 22 que había al principio, cinco ya no lo respaldan". Lo que sí se han oído son algunas voces contrarias, aunque tampoco demasiadas por ese miedo a hablar sobre el tema que se ha creado y por la "intervención de la política" en dicho asunto. 

Otra de esas voces es la de Patxi Unanue, al frente de Bodegas Arabarte. Para él, la solución pasa por un punto intermedio. "Romper con Rioja Álavesa es un disparate, pero el Consejo Regulador tampoco puede marcar unos corsés tan rígidos. Hay que fomentar las subdenominaciones por su peculiaridades. Y esa solución intermedia implica flexibilidad de todas las partes y voluntad de diálogo y de ceder, que es lo que ha faltado siempre. Hay que afrontar el tema con seriedad y diálogo y luchar por lo que es nuestro", apunta Unanue. 

Y confirma la misma sensación de Ignacio Gil y de ese clima de "miedo y secretismo" que envuelve todo este asunto: "Si te declaras afín a uno u otra postura igual dejas de vender en algunos sitios, por eso todo parece que se lleva tan en secreto". Pone sobre la mesa otro debate que a él le genera mucho malestar y es el del papel político dentro de este debate. "Se dice que detrás de 'Viñedos de Álava' están los nacionalistas y detrás del Consejo Regulador está el PP... No señores, detrás estamos los bodegueros que somos los que nos jugamos las perras y haremos lo que sea mejor para nosotros", añade Patxi Unanue.