Este mes de junio Euskadi comenzaba con la gestión del IMV, acordada y firmada con el Gobierno central ya en el mes de marzo. Y Lanbide tiene que adecuarse para poder gestionar este servicio. Por ello, este martes, ha anunciado el refuerzo de la plantilla con 24 personas para agilizar la tramitación de expedientes. Una nueva remesa de trabajadores que se suma a la ya anunciada en abril y que ha sido, desde el primer momento, uno de los puntos clave del plan de refuerzo de Lanbide. Además, durante esta misma reunión del consejo de administración, presidido por la vicelehendakari y consejera de Trabajo y Empleo, Idoia Mendia, también ha aprobado ayudas por valor de 105,9 millones de euros para emprendedores, formación de desempleados y trabajadores y contratación de investigadores.
Por otra parte, el Consejo de Lanbide ha dado luz verde a esta segunda fase del programa de refuerzo de plantilla para agilizar la tramitación de expedientes del IMV tras la transferencia firmada el pasado 16 de marzo y asumida el 1 de abril. De esta manera, a finales de este mes de junio se van a incorporar de forma temporal 20 personas de perfil administrativo y 4 de Empleo y Formación para el Empleo que se unen a los 20 administrativos, 4 técnicos de Empleo y Formación y 3 asesores/as jurídicos/as incorporados el pasado mes de mayo.
Los consejeros Azpiazu, Erkoreka, Mendia y Garamendi, esta mañana en la Comisión Mixta de Transferencias junto ministra de Política Territorial, Isabel Rodríguez / Irekia
Más de 36.000 personas lo reciben
La asunción de las nuevas competencias exige a Lanbide la gestión de nuevas solicitudes, de todas las pendientes de tramitar que estaban acumuladas antes de la transferencia, y la gestión de los expedientes activos trasvasados por el Instituto Nacional de la Seguridad Social. El programa de refuerzo tendrá una duración de dos años, con posibilidad de uno más de prórroga. Este Ingreso Mínimo Vital beneficia a más de 36.700 personas en Euskadi. Para la gestión de este ingreso, el Gobierno vasco tiene presupuestado este año 1.100.000 euros.
El IMV es una prestación distinta a la renta de garantía de ingresos (RGI), pero la transferencia permite que se complementen ambas prestaciones, aunque con ajustes. En el caso mayoritario entre los perceptores de estas ayudas se trata de personas que ya llevan trres años empadronadas en Euskadi, de modo que, por ejemplo, esas personas recibirán los 470 euros que les correspondan por el IMV y la RGI complementará esa ayuda hasta los 700 euros. Lanbide es quien ahora se encarga de todo, incluyendo la gestión del IMV y su abono, que estaba en manos de la Seguridad Social. Sobre la RGI, Euskadi daba luz verde a mediados de mayo al nuevo modelo que amplía la protección a familias con menores y pensionistas e incluye el aumento de la cuantía y la mejora de los requisitos para acceder a ella en el caso de los hogares más vulnerables.
La vicelehendakari segunda, consejera de Trabajo y exlíder del PSE, Idoia Mendia. / EFE
Nueva convocatoria de ayudas
En esta última reunión de Lanbide, también se han aprobado una serie de convocatorias de ayudas. La primera es la referida a las subvenciones para financiar la oferta formativa entre los años 2022 y 2024 de los trabajadores desempleados. Dotada con 65,9 millones de euros, las personas destinatarias son prioritariamente las desempleadas e inscritas en Lanbide como demandantes o en el Fichero del Sistema Nacional de Garantía Juvenil.
Asimismo, se ha aprobado la convocatoria para financiar la oferta formativa de trabajadores ocupados, también para los años 2022 a 2024, dotada con 29,8 millones. Otra convocatoria de ayudas es la de apoyo a las personas emprendedoras, con 3,7 millones de euros. Por otra parte, se ha aprobado incrementar en 6,5 millones de euros la partida habilitada el pasado mes de diciembre con 9,7 millones para financiar la contratación de personas jóvenes investigadoras, de entre 16 y 30 años.