Más de la mitad de las ayudas públicas en Euskadi se destinan a I+D+i

El importe global de las ayudas públicas concedidas en Euskadi asciende a 261,33 millones de euros, lo que ya supone el 0,31% del PIB. Este dato refleja que el volumen de ayudas regulares en relación con el PIB se ha ido incrementando paulatinamente desde el año 2015 hasta 2022 en el territorio, año en que este volvió a recuperarse tras la disminución de 2021. Concretamente, fue del 0,27% del PIB en 2020 y el 0,23% del PIB en 2021.

Son datos que hace públicos el Informe de Ayudas Públicas en Euskadi, realizado por tercera vez por la Autoridad Vasca de la Competencia. Este documento, además de cuantificar el monto total de ayudas públicas que se han concedido en el territorio, desglosa a qué ámbitos han ido las mismas. 

Así, más de la mitad de estas ayudas, el 52%, han ido destinadas a I+D+i. Esto ha permitido que Euskadi sea líder nacional en número de empresas innovadoras. Y es que, según la 'Encuesta de Innovación en las Empresas' realizada por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el 29,8% de las empresas vascas —de diez o más asalariados— fueron innovadoras de producto o en sus procesos de negocio, lo que hace que la Comunidad Autónoma Vasca sea aquella con más empresas de este perfil entre 2020 y 2022 y supere en casi seis puntos a la media nacional. Por detrás, quedan Cataluña (29,3%) y Navarra (26,1%). 

El informe emplea para la comparación de las ayudas de Euskadi con las de España y la UE y Reino Unido los datos relativos al periodo 2015-2020, que son los últimos publicados por la CNMC. Según los mismos, en Euskadi el mayor porcentaje de la ayuda tiene como objetivo el I+D+i (86%); en España, tiene como objetivo el desarrollo regional (63%); mientras que en la UE el porcentaje mayor de la ayuda lo recibe el objetivo de medio ambiente y eficiencia energética (55 %).

Al I+D, le siguen en cuantía las dirigidas al empleo, que suponen el 32,4% y las ayudas a las pymes, que acaparan el 13,7% del total. Además, las ayudas a cultura y conservación del patrimonio suponen el 1,8% del total de ayudas horizontales y, por último, el medioambiente y la eficiencia energética se llevan un 0,12%.

Además, el estudio refleja la masiva utilización de la subvención como instrumento de ayuda en Euskadi. El dato que en 2015 era del 76,99% se ha incrementado hasta llegar a un 96,46% en 2022, dejando los métodos siguientes en torno al 1,4%: préstamos o anticipos reembolsables y ventajas fiscales.