El máximo accionista del Baskonia y del Deportivo Alavés, Josean Querejeta, posa para la foto.

El máximo accionista del Baskonia y del Deportivo Alavés, Josean Querejeta, posa para la foto. EFE/David Aguilar

Economía

Querejeta reestructura sus negocios tras la caída en ventas de un 48% de Gretel

El máximo mandatario del Baskonia ha decidido fusionar sus negocios en dos compañías tras registrar un resultado negativo de 200.000 euros que se refleja en el descenso en las ventas de un 48,14% en la cadena de golosinas Gretel tras la pandemia

6 febrero, 2024 05:00

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Josean Querejeta está de cumpleaños. El guipuzcoano cumple 35 años como presidente del Baskonia alejado de los focos, dando responsabilidad a sus seres más queridos y disfrutando como uno más de todo lo construido durante este tiempo. Su equipo es uno de los más importantes a nivel nacional y se codea con los mejores de Europa en la más que reclamada Euroliga, competición en la que cuentan con licencia desde hace más de 20 años. Una situación envidiable que se coronó de forma definitiva con la remodelación del Buesa Arena, pabellón que cuenta con una capacidad para 15.000 personas. Una gestión que, desde su llegada en 1988, fue consolidándose con el paso de los años, poco a poco.

Querejeta abandonó la entidad azulgrana como jugador un año antes, en 1987, una decisión que le permitió dar otra aún más importante, dejando el chándal a un lado para vestirse con traje y camisa. Para convertirse en uno de los empresarios más destacados del baloncesto nacional, Querejeta optó por una vía directa que le permitió engrandecer el nombre del Baskonia: contar con diversas sociedades que le inyectara al club un 'plus' en lo económico, al menos durante los primeros años. El vasco se ha apoyado mucho durante este tiempo en varias sociedades que le han acompañado durante todos estos años: Gretel 4 SL, Gretel Distribuciones SA, Gretel Inmobiliaria SA, Lazkao Gasteiz SL y Proyecto 1983 SL.

Querejeta comenzó su andadura empresarial con la cadena de golosinas Gretel, con tan solo 26 años

Compañías que, según El Confidencial, durante los últimos años han perdido fuerza y obligan al de Lazkao a tener que reajustar sus negocios, empezando por un lado por su cadena de golosinas Gretel, negocio que emprendió cuando contaba con 26 años, en 1983. Querejeta disponía a principios de siglo de más de 20 tiendas por varios puntos de Euskadi (la gran mayoría en Álava) e incluso también de Barcelona, ya que cuando empezó a idear su imperio de chucherías, militaba como jugador en el Joventut de Badalona.

A pesar de que los primeros años fueron exitosos, las cifras bajaron a partir de la última década, especialmente tras la pandemia, con un descenso en las ventas de un 48,14% en productos, lo que provocó el cierre de dos de las últimas tres tiendas que poseía en Vitoria-Gasteiz. A día de hoy está abierta una de ellas, la que se encuentra dentro del centro comercial de Dendaraba. Según los últimos datos reflejados, el número de ventas ascendió un 10,28% a diciembre de 2022. Una cifra insuficiente y que es una de las principales razones de que el mandatario haya tomado esta decisión. 

Deterioro de valor

A raíz de los movimientos sufridos durante estos años, Querejeta ha realizado un cambio estructural dentro de su rutina empresarial. Con el propósito de simplificar su número de empresas a raíz de diversas operaciones de escisión total y fusión por absorción simultánea, el máximo mandatario baskonista contará con dos compañías en total: Aldatxe 2022 SLLazkaokoa SL. Ésta última da de qué hablar, puesto que Querejeta ha visto cómo sus beneficios se han visto reducidos por segundo año consecutivo, después de reducir esas ganancias 102.000 euros.

En el ejercicio del año 2022 sufrió un deterioro por enajenaciones de instrumentos financieros de 318.000 euros

Esto se debe, principalmente, a que en el ejercicio del 2022 sufrió un "deterioro por enajenaciones de instrumentos financieros de cerca de 318.000 euros". Unas cifras que obligan a que el de Lazkao simplifique todo a dos sociedades y así tener un mayor control de los costes y no repetir esto último. Cabe destacar que durante el ejercicio de hace dos años, "notó deterioros del valor de las participaciones por importe de 422.389 euros y reversión de deterioros por importe de 104.583,71 euros". En 2021, sin embargo, fueron de 13.057 y 49.381 euros