El vicelehendakari y consejero de Economía, Trabajo y Empleo, Mikel Torres, prevé seguir la senda que marcó Idoia Mendia en materia laboral con respecto a la realización de un experimento para implantar la semana de cuatro días. Así, según ha podido saber Crónica Vasca, Torres se reunirá mañana con la fundación Fabrika, el Centro para la Transición Cultural de las Organizaciones impulsado desde la patronal guipuzcoana Adegi, para conocer de primera mano cómo está yendo la primera fase de la prueba piloto, ya iniciada, y que consiste en un concienzudo análisis de las características y los condicionantes del mercado de trabajo en Euskadi.
“Voy a ir a visitar al equipo de Fabrika, en Donostia-San Sebastián, para ver cómo están llevando a cabo su análisis en esta primera fase con el objetivo de poder hacer una prueba piloto en algunas empresas y poder analizar qué tal funcionaría la semana laboral de cuatro días”, ha avanzado el vicelehendakari.
Tras su implantación de forma experimental en diversas compañías previamente acordadas, se llevaría a cabo una tercera fase que consistiría en medir tanto la rentabilidad, como el rendimiento, la productividad y la satisfacción laboral de los participantes. Se trata de un proyecto a tres años y cuenta con una financiación de 6,5 millones de euros -2,5 de los cuales este año- aprobados en los presupuestos del departamento de Empleo del Gobierno vasco.
La jornada laboral, a debate
La jornada laboral es uno de los puntos más enquistados actualmente en el debate político. Desde el Gobierno central están tratando de implementar la reducción de las 40 horas semanales para cumplir con uno de los compromisos que adquirieron en el pacto de legislatura alcanzado por el Partido Socialista y Sumar. A pesar de la oposición mostrada por las asociaciones empresariales, la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, sigue adelante en su empeño por rebajar la jornada semanal a 38,5 horas este año y a 37,5 horas en 2025.
En opinión del vicelehendakari, “ya han pasado más de 40 años desde que entró en vigor la semana laboral de 40 horas y sigue vigente, cuando la economía y el mercado laboral han evolucionado de una forma totalmente diferente”, por lo que considera que el momento actual es “el momento perfecto”, ya que “la economía está creciendo a un ritmo muy importante, hay récord de afiliación a la Seguridad Social, una importante disminución de la tasa de desempleo y las empresas tienen una situación de beneficios extraordinarios”, por lo que “es perfectamente asumible”, defiende. “Creo que es el momento idóneo para plantear una rebaja de la jornada laboral”, corrobora a este periódico.