CAF negocia nuevas alianzas para competir en Europa con su sistema de señalización
La constructora guipuzcoana, tras no lograr la compra de Thales, busca desarrollar su filial de balizamiento porque es una de las claves para crecer en el mercado europeo
19 octubre, 2021 05:00La constructora de trenes guipuzcoana sigue empeñada en buscar una solución para reforzar sus sistemas de señalización. CAF intentó sin éxito hacerse con la compañía alemana Thales que vendía su sistema de guiado ferroviario en una apuesta por reforzar este servicio que se está convirtiendo en una de las claves para el crecimiento del sector ferroviario. Actualmente CAF cuenta con su filial Signalling para desarrollar estas tareas, pero necesita mejorarla para adaptarse al nuevo Sistema Europeo de Gestión del Tráfico Ferroviario (ERTMS) que es el programa sobre el que la Unión Europea está desarrollando el control de navegación ferroviaria. Estos sistemas de balizamiento son un componente fundamental para cualquier constructor que perderá opciones por competir en cualquier adjudicación de construcción de trenes si no presenta una solución avanzada en este campo.
Un buen indicador de la importancia de esta solución es que CAF ha llegado a plantearse una inversión de más de 1.500 millones de euros para esta cuestión. De momento, ha puesto en marcha diversas acciones para mejorar la solución que ha desarrollado con su filial por varias vías que no descartan compras de otras compañías, pero que se están centrando ahora en el desarrollo de su propia división y en el crecimiento a través de acuerdos y alianzas comerciales con otros fabricantes. La señalización digital del tráfico ferroviario es un sistema complejo que emplea dispositivos ubicados en la vía que reciben señales de los trenes y que sirven para gobernar el tráfico ferroviario. La apuesta de la Unión por esta gestión a través del ERTMS cobra especial importancia dado el papel del ferrocarril en el incremento del tráfico de mercancías y pasajeros para la descarbonización de la economía. Según explican los analistas, "se hace necesario ya no solo construir buenos trenes, sino tener la tecnología de su gobierno en circulación".
Hace unos días, la propia presidenta de la Comisión Eurpea, Ursula von der Leyen, señalo que la gestión del tráfico de trenes con el sistema europeo "es un requisito previo para la multimodalidad interoperable y sostenible del mañana que permitirá a los ciudadanos europeos atravesar sin problemas la UE". Por lo tanto, la importancia de que los constructores presenten en las licitaciones un buena solución de señalización es de las claves de competitividad. De hecho, uno de los gigantes de la construcción de trenes en Europa y que es uno de los principales competidores de CAF, Bomardier, también intentó pujar por Thales, aunque finalmente la compañía alemana eligió a Hitachi para seguir negociando en exclusiva la adquisición.
Oportunidad para adquirir activos en Francia
Y es que la compañía guipuzcoana está registrando un buen año gracias a la apuesta por el ferrocarril para avanzar hacia una movilidad sostenible, así en el primer semestre del año ha ganado 42 millones de euros, frente a las pérdidas de 35 millones registradas en 2020. Las ventas ascendieron a 1.411 millones de euros, un 26% más que en el mismo periodo de 2020 y acumula una cartera de pedidos que crece hasta los 9.400 millones. Son cifras récord que permiten mejorar una situación financiera para afrontar posibles oportunidades como las que pueden surgir en Francia. En el país galo, el gigante Alstom se fusionó con Bombardier y se van a ver a obligados a vender activos para garantizar la competencia.
CAF está reforzando su presencia en el país vecino ganando una dura batalla legal con Alstom que trató, hasta con seis recursos, de impedir que la compañía guipuzcoana desarrollara el encargo de 146 trenes de cercanías de París valorado en 2.500 millones de euros, de los que 1.060 serán para la compañía guipuzcoana. La empresa vasca con sede Beasain se adjudicó también un importante contrato con el operador SNCF a finales de 2019 para el suministro de 28 trenes regionales con opción de 75 adicionales, que prestarán servicio en las líneas París-Clermont y ParísLimoges-Toulouse y por un coste de 700 millones de euros.
Unas buenas cifras a las que ha contribuido el buen comportamiento en la venta de autobuses con un crecimiento interanual del 56% motivado por la menor estacionalidad de ventas, habiendo pasado de 494 unidades entregadas en el primer semestre de 2020 a 743 en el primer semestre de 2021. Por su parte, las ventas en el sector del ferrocarril se han visto favorecidas en un 19% interanual por el impacto de la crisis del Covid-19 durante el pasado ejercicio.
Recientemente la empresa se ha adjudicado a través de su filial Euromaint Rail AB, se ha adjudicado dos contratos de servicios en Suecia por un importe global de más de 100 millones de euros. El pasado mes de junio, la empresa vasca firmaba varios contratos más con diferentes países. Uno de ellos por otros cien millones de euros para suministrar tranvías a Bélgica y Australia; además de otro con Alemania para suministrar 60 trenes propulsados por baterías, y otros dos, también en el mercado alemán, por cerca de 200 millones de euros.
Los contratos anunciados este año acercarían la cartera de pedidos a máximos históricos al volver a superar los 9.000 millones de euros, de los que la mayoría, 8.523 millones, pertenece a proyectos ferroviarios y, el resto, al negocio de autobuses operado por Solaris. La nueva contratación en el primer trimestre ascendió a 1.080 millones de euros, sin incluir 350 millones adjudicados con posterioridad en Suecia, Portugal y España, cinco veces más que en el primer trimestre de 2020.