La compañía guipuzcoana SAPA, uno de los socios de Bain Capital para comprar ITP Aero, va a hacerse este miércoles con un 5% del accionariado de Indra para lo que desembolsará 90 millones de euros, según ha informado a la Comisión Nacional de Mercado de Valores (CNMV). Una operación de gran envergadura para la empresa de la familia Aperribay que, según las cuentas presentadas en el Registro, obtuvo un beneficio antes de impuestos (ebitda) de 13,5 millones en 2019 y de 6,7 millones en 2020. Y es que el interés de la operación va más allá de las sinergias en cuestiones de defensa que pueden desarrollar ambas compañías y encaja en la estrategia que busca que Indra entre en la operación de ITP Aero, participando en su accionariado.
SAPA se hará con ese 5% que comprará a la Corporación Financiera Alba en una operación que va a financiar con Deutsche Bank. De este modo, la empresa vasca se convierte en el cuarto accionista de Indra, mientras que Alba se queda con 3,21% de Indra del que se seguirá desprendiendo. La herramienta de inversión de la familia March tiene un representante en el consejo de Indra por el que optará ahora SAPA y que podría ser clave en la relación de mayorías.
Actualmente Indra, empresa especializada en tecnología de defensa, aeronáutica, posicionamiento de satélites y 'big data' está participada por el Gobierno central a través de la SEPI con un 18% de acciones. Indra analizó la posible participación en la compra de ITP, pero desechó la oportunidad, a pesar del interés del Ejecutivo central. La situación en la compañía y su relación con el Gobierno se complicó aún más cuando desde Industria se planteó a Marc Muntra como presidente de Indra. Parte del consejo se opuso a su incorporación y se llegó a un precario acuerdo para que gestionara una presidencia no ejecutiva. Actualmente la gobernabilidad de la compañía es muy complicada con una bicefalia que divide al órgano de gobierno, aunque los resultados de este año están siendo muy positivos con una vuelta al reparto de dividendos.
Y es que la entrada de SAPA en el accionariado de Indra se reforzaría con otra operación del Gobierno a través de la SEPI. Industria busca aumentar su peso con la incorporación a la compañía de una de las participadas de la SEPI, Epicom. Esta consolidación, aumentaría el peso de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales en Indra de tal modo que, sumando la aportación de SAPA, podría obtener una mayoría cualificada para forzar la entrada en ITP Aero.
Indra un seguro de control para el Gobierno en ITP Aero
Aunque Indra no ha querido hacer valoraciones oficiales de la operación, fuentes conocedoras del proceso han confirmado a 'Crónica Vasca' que la importancia de que Indra entre en ITP Aero con una participación de entorno al 15% reside en que supondría un seguro de control para el Gobierno central cuando Bain Capital, el fondo norteamericano que lidera la compra de la aeronáutica vasca, venda su participación cuando cierre su ciclo de inversión.
Es hasta junio de 2022 cuando se dispone del tiempo para que Bain conforme el consorcio propietario de ITP y realice el desembarco definitivo. De momento, cuenta con SAPA y con los inversores de JB Capital. El Gobierno vasco está pendiente de decidir su entrada en función de que el pacto de socios de cobertura legal a sus peticiones de "arraigo" en Euskadi. Aunque la puerta está abierta para Indra, parece complicado que pueda concretarse la operación para esas fechas. Por eso se trabaja con la hipótesis más probable de terminar la operación más adelante.