En plena celebración del 25 aniversario de la Confederación Española de Directivos y Ejecutivos (CEDE), el presidente de Kutxabank, un Gregorio Villalabeitia ya en la plataforma de salida para ser sustituido por Antón Arriola, ha compartido mesa con Pablo Hernández de Cos e Ignacio Goirigolzarri para reflexionar y compartir los retos de la banca en un contexto marcado por la inflación y la subida de tipos.
El máximo dirigente del banco vasco, que encara ya sus últimas semanas como presidente de la fusión de BBK, la Kutxa y la Caja Vital, ha contrapuesto la mala reputación de los bancos frente a los esfuerzos "que no le corresponden" y, sin embargo, sí están haciendo las entidades bancarias como la atención a la España vaciada o el servicio universal, algo que ha calificado como "algo más propio del sector público". El presidente saliente de Kutxabank ha hecho particular hincapié en "los dos hombros que están arrimando los bancos" en ámbitos como la transición energética.
En un momento en el que los directivos bancarios "trabajan en un escaparate", Villalabeitia se ha referido al reto de la reputación bancaria, al que se ha referido como un desafío "crítico" y, en muchos casos, "no justificado" y que provoca un "problema de litigiosidad de altísimo coste". Villalabeitia ha hecho un análisis de la situación bancaria en la que ha reprochado que no todos los bancos tengan las "mismas reglas de juego", sugiriendo que no todos son supervisados de la misma manera.
Villalabeitia ha presumido de los "accionistas de largo plazo" en las empresas, con el caso de BBK, Kutxa y la Caja Vital como mejor botón de muestra. La fusión de las tres cajas vascas también ha sacado pecho, al hilo de las diferencias sobre la atención al ámbito rural,, de su capilaridad de red, un aspecto donde Villalabeitia ha asegurado que se le saca "traineras" a la banca europea.
Hernández de Cos apunta al 2,5% como el tope de la subida de tipos
En la mesa compartida con Villalabeitia también ha participado el presidente del Banco de España. Pablo Hernández de Cos ha expuesto los riesgos a los que se enfrentan la economía y ha defendido la subida de tipos como el mecanismo que recomienda la literatura económica para hacer frente a la inflación, sobre la que estima que el 80% tiene detrás a los efectos directos e indirectos de la energía y los alimentos.
Ahora el principal reto de la autoridad bancaria pasa por evitar los efectos de segunda ronda o que los cuadros económicos queden desanclados de la realidad económica, algo que ha empezado a dar unas "señales iniciales". De ahí que la subida sea algo más intensa de lo que inicialmente se preveía. La previsión que ha apuntado Hernández de Cos es que las subidas de tipos lleguen hasta el 2,25%-2,5% en marzo, aunque dependerá de las incertidumbres económicas para que esa cifra, que no es un compromiso del Banco Central Europeo, sea la misma.