Nueva reunión entre parte social y cúpula de Ibermática sin acuerdo. El encuentro de este lunes, al que la dirección de la tecnológica donostiarra se había comprometido a acudir con una propuesta de convenio que concretase las subidas salariales para los años 2024 y 2025, ha concluido sin avances después de que la nueva propuesta solo incluyese subidas salariales para 2024. Así lo aseguran fuentes sindicales presentes en la reunión con la empresa.

Según esas mismas fuentes, la cúpula acudió a esa reunión ratificando las propuestas de 2022 y 2023. Una oferta basada en un criterio de subida salarial diferenciada entre quienes cobran más o menos de 27.000 euros y que comprendía una paga no consolidable -que no se fijaría en el sueldo de los empleados- de un 3% para quienes cobrasen menos y un 1% para quienes cobrasen más. Además, se contempla una subida salarial del 4% en 2023 para los trabajadores con sueldos inferiores y un 3,2% para quienes cobrasen más.

A esa oferta se ha sumado en esta reunión una nueva propuesta pero que solo afectaría a 2024 con tres supuestos

  • De producirse una deflación en 2023 se negociaría de cero para la subida salarial de 2024
  • Si la inflación oscilase entre el 0% y el 2%, la subida de las nóminas sería de un 1% sin más debate
  • En caso de que la inflación de 2023 fuese superior al 2% se negociaría cuánto subir aunque, según los sindicatos "sin garantías de que se parta del 1%"

La propuesta para 2025 no se ha concretado la oferta, aunque todo apunta a que se haría de un modo similar a la propuesta de 2025. El comité, insatisfecho con la nueva oferta, ha decidido darse este martes como jornada de reflexión para pensar qué nuevas acciones a acometer después de que la reunión haya salido sin más respuesta de la dirección que el traslado a los máximos directivos de la situación de la negociación. Se antoja poco probable que llegue una nueva oferta ante las propias coyunturas del calendario: es cuestión de semanas que el traspaso de ProA Capital a Ayesa sea autorizado y rubricado -se espera que la operación esté hecha antes de final de año- y el margen de negociación del equipo actual también tiene que tener esa cuenta atrás en mente.

Después de la llegada de la situación al pleno del Parlamento vasco no es descartable que la coyuntura de Ibermática sea objeto de debate en otras instituciones públicas vascas.