Después de pegar otro recorte más a su producción final de 2022, Mercedes Vitoria también empezará el 2023 con mal pie. El primer año sin Emilio Titos al frente de la factoría más grande de Euskadi comenzará con un nuevo recorte de la producción para "ajustar la capacidad productiva de la planta a las demandas de los mercados". En concreto, tras los parones de producción de diciembre, Mercedes volverá el 2 de enero a ponerse en marcha, pero desde la segunda semana del año el turno nocturno de montaje bruto y pintura se verá recortado en media hora.
Así lo ha comunicado este martes la empresa en la que es su primera comunicación referente al 2023. En un anuncio en el que la dirección ya felicita la Navidad y el Año Nuevo a sus empleados la firma ha comunicado un recorte del turno nocturno en esas dos divisiones para dejarlos en siete horas y media. El frenazo llega a esa grandes divisiones, pero también podría extenderse al personal que trabaje en otras divisiones.
El recorte, sin embargo, no quita para que se activen de nuevo sábados. Los tres sectores productivos (montaje bruto, montaje final y pintura) tendrán que trabajar los sábados 14, 21 y 28 de enero en unos turnos que no afectarán a la sección de prototipos. Junto a esa activación, la compañía también recurrirá a la bolsa para activar los tres turnos de producción del 30 de enero, tal y como recoge el polémico convenio colectivo de la empresa.
La decisión de reducir la producción entre semana no afectará, en cambio, a los empleados de montaje final, que seguirán trabajando ocho horas.