El Gobierno vasco reduce a la mitad un fondo para ahorro energético municipal por falta de proyectos

Si el eficiencia energética y las alternativas renovables están día a día en agendas políticas, planes empresariales y medios de comunicación, cuesta que el tema baje a espacios más 'terrenales' y, sobre todo, que las buenas intenciones echen a andar. Una buena prueba de ello es la frialdad con que han acogido los ayuntamientos vascos el programa de ayudas para hacer estudios sobre eficiencia y ahorro energético puesto en marcha en 2021. El presupuesto con que contaba el Ente Vasco de la Energía (EVE) para financiar proyectos de este tipo se reduce de 10 millones a 5 ante la falta de propuestas por parte los consistorios y empresas municipales.

Se trata de un plan de subvenciones del Gobierno vasco para la realización de estudios que permitan ahorrar energía a los municipios y comarcas en áreas como el alumbrado exterior, en los edificios municipales o avanzar en la movilidad sostenible. Canalizadas por el EVE, dependiente de la consejería de Desarrollo Económico, cada actuación cuenta con ayudas de hasta 200.000 euros en el caso de los municipios de mayor tamaño (el mínimo son 15.000 euros) con un presupuesto global inicialmente de 10 millones de euros.

El EVE reduce a la mitad esta cantidad y amplía el plazo para presentar proyectos, que inicialmente concluía el próximo mes de junio y se estira hasta diciembre de este año, para poder mejorar las cifras de un programa que, por ahora, está teniendo un escaso recorrido. En la modificación de bases publicada en el Boletín Oficial del País Vasco se indica que "la evolución del programa de ayudas muestra unos datos, tanto en número de solicitudes de ayuda recibida, número de proyectos subvencionados como en presupuesto comprometido, muy alejados de los objetivos que se pretendían alcanzar".

Placa solar térmica, en una imagen de archivo / EP

Interés por la energía

El EVE aclara que se reduce la cuantía presupuestaria a 5 millones porque "no hay expectativas" de que puedan consumirse los 10 millones y aclara que esos fondos servirán para promocionar otras actuaciones en el ámbito de la mejora de la sostenibilidad energética a través de nuevas convocatorias que se publicarán este año. El dinero por tanto no se perderá, sino que se utilizará más adelante.

Es más, desde el organismo energético dependiente del Gobierno vasco se asegura que hay "un interés creciente" por parte de las entidades locales en este tipo de proyectos energéticos a pesar del resultado concreto de este programa.

Precisamente Lakua acaba de lanzar una estrategia conjunta en materia de energía con 14 municipios y comarcas a fin de "promover la acción local por la transición climática y energética en Euskadi". Es un iniciativa impulsada por el propio EVE junto a Ihobe, la sociedad pública de gestión ambiental, y la colaboración de la Red Vasca de Municipios Sostenibles-Udalsarea 2030 y el proyecto LIFE IP Urban Klima 2050. Por ahora en este grupo figuran los ayuntamientos de Abanto Zierbena, Amurrio, Balmaseda, Basauri, Bilbao, Donostia, Durango, Eibar, Errenteria, Irun, Legazpi, Vitoria y las entidades comarcales de Cuadrilla de Gorbeialdea, Mancomunidad de Nerbioi-Ibaizabal y Oarsoaldea.