Basquevolt 'caza' ingenieros de los gigantes europeos de baterías como LG o Northvolt
El proyecto de Miñano que aspira a revolucionar la movilidad eléctrica se lanza a la batalla por el talento con los líderes del sector, aunque prevé generar una cantera en Euskadi alrededor de estos expertos 'importados'
27 abril, 2023 05:00Noticias relacionadas
Basquevolt, la gran esperanza de Euskadi para convertirse en capital europea de la movilidad eléctrica, se cocina a fuego lento. Es un proyecto que empieza de cero, no se cansan de repetir sus responsables, y por ello necesita en primer lugar unos buenos cimientos. Y no está siendo fácil fichar a ese primer núcleo que haga crecer la compañía. Los profesionales escasean en un campo como el de las baterías, por lo que Basquevolt ha tenido que entrar a esa guerra abierta por el talento en tantos sectores y que, en el caso de la firma de Miñaño, presenta pocos ríos en los que 'pescar'.
En estos momentos, la compañía impulsada por Gobierno vasco, Iberdrola, CIE Automotive o Enagás ronda la treintena de trabajadores, que se espera puedan ser 60 a final de año. Es un número corto pero se trata de perfiles altamente cualificados, la mayoría ingenieros. Y para ganar volumen hay que recurrir al extranjero, lógicamente, y en concreto a empresas que ya se manejan en el terreno de las baterías como son la sueca Northvolt, con una gigafactoría en la que están implicadas BMW o Volkswagen, o el grupo LG, que hace lo propio en Polonia.
Se trata de poder aprovechar el conocimiento que ya tienen estos ingenieros para adaptarlo y dar nuevos pasos en el terreno de la batería en estado sólido. No hay que olvidar que Basquevolt aspira a poner en marcha una gigafactoría de baterías única en Europa, por lo que el talento se importa y se pule en Miñano a partes iguales. En concreto la firma ubicada en el parque tecnológico y gestada en el CIC EnergiGune ha cerrado ya la incorporación de varios jóvenes de la planta de LG en Polonia, así como los fichajes de al menos dos cargos de responsabilidad del proyecto sueco de Northvolt. También se está recurriendo a países como Inglaterra, Estados Unidos, Corea del Sur o Japón.
Tecnología "para cambiar el mundo"
"Evidentemente no podemos pagar lo que pagan LG o Northvolt", confiesa Francisco Carranza, CEO de la compañía alavesa, en relación a sus fortalezas para captar trabajadores. "Lo que nos ayuda a convencerles es que hemos creado un entorno multicultural, inclusivo, donde la gente se siente a gusto. Al final pretendemos hacer una tecnología vital para la protección del medio ambiente, aspiramos a lograr una batería que cambie el mundo", dice el CEO, que trata de vender Basquevolt y Euskadi como "la tierra prometida" de la movilidad sostenible.
"Aquí no puedes ofrecer las condiciones de París o de Seúl pero sí una cultura acogedora y un proyecto ilusionante. No somos una empresa aislada aquí en Vitoria. Queremos contribuir a que Europa pueda mantener su industria de automoción y que no dependamos de productos traídos de China. Que pueda mantener su independencia y su poder de decisión", argumenta el ingeniero y doctorado por la Universidad de Sevilla, que aprovecha también su pasado en fabricantes como Renault o Stellantis para ir conformando la plantilla.
Evidentemente en esa competición por el talento hay éxitos y fracasos, y cuesta sobre todo atraer a Euskadi a personas que ya tienen su proyecto familiar anclado en otro país. "Estamos tranquilos. De momento hay que traer gente de fuera, eso sabíamos que iba a ser así. En Euskadi no tenemos aun las competencias para entrar a las baterías, pero sí podemos generar una cantera muy competente en el futuro", explica Carranza, que aclara que los proyectos de baterías de Extremadura y Sagunto, por hacer referencia a los otros dos casos parecidos en España, no son competencia para Basquevolt por tener las miras en otro tipo de tecnología y por ello también en perfiles profesionales distintos.
"Poco a poco irá lográndose un equilibrio entre los expertos que hemos reclutado y nuestra propia cantera, que se irá formando alrededor de esas personas con más experiencia. La idea es que de esos 60 con que contaremos a final de año una parte sean vascos", señala.
Basquevolt sigue creciendo con vistas a poder presentar sus primeros prototipos dentro de algo menos de un año, en el primer tramo de 2024, para empezar entonces a hacer los primeros trazos de lo que será la línea piloto, prevista para 2025. Si todo va bien la producción a gran escala de baterías comenzará en 2027. El proyecto vasco ha quedado fuera de la última convocatoria de ayudas del Gobierno central para iniciativas vinculadas al coche eléctrico, en la que solicitaba algo más de 14 millones de euros.