Construcciones Urrutia culmina su integración en Grupo Urbas tras su absorción por parte de la compañía madrileña en febrero de 2021. La directiva de la compañía alavesa, presidida por Juan Cortezo García, ha sido cesada para dar paso al nombramiento de Guadahermosa Proyectos Urbanísticos 2001 SL, una de las sociedades del grupo, que se convierte en administrador único de Construcciones Urrutia.
No obstante, aunque este proceso de cambio del órgano de administración se ha hecho efectivo en el registro hace unos días, se produjo el pasado mes de enero, tal y como puntualizan desde la compañía, que descarta la vinculación de esta operación con los problemas en los que se ha visto envuelta Construcciones Urrutia en los últimos meses y que han conducido a la constructora vasca a abandonar sus trabajos en Anboto Dorrea, la quinta torre de Garellano en Bilbao.
Asimismo, desde Grupo Urbas advierten de que el cese de la directiva de Construcciones Urrutia, registrado el pasado 2 de mayo, se trata de algo que fue acordado a principios de 2021, en el momento en el que se firmó el contrato de compraventa, donde se incluyó este traspaso como una de las condiciones pactadas para efectuar la operación. Aun con todo, a pesar de ser un movimiento previsible, desde Grupo Urbas no han elegido aún a las personas que se harán cargo de esta empresa del grupo.
“El cese de Juan Cortezo, que se ha producido en enero de 2023, forma parte estrictamente del proceso de compraventa pactado que preveía la sustitución del órgano de gobierno de la sociedad; esto es, de Consejo de Administración a Administrador Único. La operación de venta llevaba asociada la salida amistosa de Cortezo tras la integración y consolidación de la constructora vasca dentro del Grupo Urbas”, explican a Crónica Vasca tras ser interrogados acerca de esta cuestión.
El futuro de los proyectos de Urrutia en Bizkaia
Pero, ¿cómo podría afectar este traspaso de poder a la Constructora Urrutia y a todos los proyectos que la firma alavesa tiene en estos momentos en fase de construcción en Bizkaia? El pasado mes de febrero, Construcciones Urrutia paralizaba la construcción de Anboto Dorrea, la quinta Torre de Garellano, proyectada como el rascacielos residencial más alto de Euskadi. Los trabajos para finalizar esta torre, que está levantándose junto a la estación de autobuses de la capital vizcaína con 166 viviendas, han sido reanudados por la nueva constructora que han elegido los socios cooperativistas, la vizcaína Vusa.
Por otro lado, también se encuentran en ‘standby’ las obras que Construcciones Urrutia está acometiendo en otro edificio de 36 viviendas situado en el barrio bilbaíno de Santutxu bajo el nombre de Itsas Izar y los cooperativistas de un bloque de 81 viviendas en la localidad marinera de Santurtzi denominado Atalaya Santurtzi están sufriendo retrasos en los plazos de ejecución previstos, con quienes esperan alcanzar un acuerdo.
En los tres casos la empresa alavesa ha solicitado más dinero a sus clientes al considerar “inviables” los presupuestos acordados a causa del encarecimiento de los materiales, la guerra de Ucrania y el aumento de la inflación. No obstante, desde Grupo Urbas afirman que si se alcanza un acuerdo con los vecinos de los dos bloques afectados, los trabajos contratados con Construcciones Urrutia seguirán en marcha, ya que el estado de las cuentas de la compañía es positivo.
De esta forma desmienten que la situación económica que atraviesa la compañía alavesa sea complicada. Y es que conforme a los últimos datos publicados, Urrutia disparó su facturación casi un 40% en 2021 hasta alcanzar los 34 millones de euros, con un EBITDA positivo de casi un millón de euros. Aunque falta por conocer el detalle de las cuentas de Urrutia correspondientes al ejercicio 2022, “Urbas ha presentado los mejores resultados hasta la fecha, como culminación a tres años de expansión mediante la adquisición de empresas que, como Urrutia, tienen gran proyección dentro del grupo”, subrayan.
Las cifras de ventas y EBITDA son “sin precedentes”, ya que ha aumentado un 50% su facturación hasta alcanzar los 305 millones de euros y el EBITDA ha crecido más de un 58% hasta los 41 millones de euros, lo que ha contribuido a que el área de Construcción de Urban, en su conjunto, haya reportado 206,5 millones de euros de facturación.