Una de cada cuatro cooperativas de Euskadi no prosigue su andadura

El modelo cooperativo sigue siendo una alternativa para las empresas vascas y así lo demuestran los datos. A punto de celebrar veinte años de trayectoria, Elkar-Lan ha promovido la constitución de 1.967 empresas cooperativas entre 2003 y 2022, lo que arroja una media de un centenar al año.

No obstante, el año pasado concretamente, la sociedad para la promoción de cooperativas impulsó la creación de 137, un dato positivo a pesar de ser un 8% menos que el año anterior, ya que en 2021 intermedió en la gestación de 149 cooperativas, tal y como se desgrana de su informe anual. Además, el conjunto de estas nuevas cooperativas conformadas el pasado año ha generado un total de 366 empleos, lo que supone un ratio de 2,7 empleos en cada una de ellas.

Se trata de una fórmula residual, pero muy arraigada en nuestro territorio. Por territorios históricos, el 45,26 % se crearon en Bizkaia,  seguida de Gipuzkoa con un 41,61 % y por último Araba, con un 13,14 %. La mayoría de iniciativas empresariales pertenecen al sector servicios, mientras que las derivadas de actividades industriales y agrarias son muy reducidas. De las 137 cooperativas constituidas, la mayoría, 121, fueron de Trabajo Asociado.

Las razones por las que se opta por la forma jurídica de cooperativa son principalmente por las ventajas y ayudas que conlleva, tal y como respondió un 38 % de las personas encuestadas por Elkar-Lan. Un 22,4 % adoptó esta estructura por recomendación de su asesor y únicamente el 18,6 % lo hizo por convicción y atracción de esta filosofía.

Iñaki Nubla y Javier Sanz, presidente y director de Elkar-Lan, en la presentación de los resultados de 2022. Elkar-Lan

Experiencia emprendedora previa

Dos de cada tres emprendedores en la CAV son hombres y la mayor parte de las personas que deciden constituir una cooperativas tienen entre 35 y 44 años y cuentan con estudios superiores o medios. Además, casi la mitad, el 48,6%, poseen una experiencia previa en emprendimiento.

La inversión inicial que se realiza en el momento de constituir una cooperativa ronda los 8.000 euros de media y prácticamente una de cada tres necesita financiación externa. Además, el 86,8 % de los socios cooperativos optan por inscribirse en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos y sólo el 13,2 % por el Régimen General de la Seguridad Social.

La tasa de desaparición de las cooperativas constituidas, tal y como advierten desde Elkar-Lan, es del 26,02 %, ya que, según su archivo, se han liquidado un total de 203 cooperativas y otras 310 no tienen actividad a día de hoy de entre las 1.967 promovidas entre 2003 y 2022. Es decir, una de cada cuatro cooperativas puestas en marcha no prosiguen.