La Corporación Mondragon, a través de su cooperativa Krean, ha alcanzado un acuerdo con Statkraft con el objetivo de "dar sentido ambiental y social a los proyectos renovables que se desarrollen en Euskadi". Ambas compañías centrarán esfuerzos en que estas instalaciones "sean comprendidas e integradas en la sociedad" y en facilitar "que el acceso a la energía y a la propiedad de las instalaciones esté abierto a los consumidores", aseguran.
A partir de ahora, el primer productor renovable de Europa, y la ingeniería y promotora de Mondragon Corporación trabajarán conjuntamente en la definición y ejecución de una fórmula que permita que este tipo de proyectos convivan en armonía con su entorno, con el objetivo de que la ciudadanía, la industria y las empresas y administraciones públicas vascas formen parte de los mismos.
Así, Krean comenzará abordando la futura implantación de los dos primeros proyectos eólicos que Statkraft desarrolla en estos momentos en Euskadi, que se encuentran en fase inicial de desarrollo y en los que realizará una inversión conjunta superior a los 90 millones de euros con el objetivo de que entren en funcionamiento en 2027.
El parque de Itsaraz, en la frontera entre Araba, Bizkaia y Gipuzko, estará situado entre Aramaio y Eskoriatza. Contará con 8 aerogeneradores que proporcionarán una capacidad de 60,4 megavatios. Y el parque de Piaspe, en Gipuzkoa, estará ubicado en los municipios de Azpeitia, Zestoa y Errezil. Contará con 5 aerogeneradores y una capacidad de 33 MW. Entre ambos podrían atender el consumo anual de 68.000 hogares.
Socialización ciudadana
En virtud de estos acuerdos, las dos compañías promoverán unidas Itsaraz y Piaspe, trabajando conjuntamente "en la definición de una estructura jurídica y económica que permita la combinación de los parques eólicos con industrias, entidades públicas locales y ciudadanos".
Ambas partes plantearán una solución para la transición energética en Euskadi, que aspira marcar las pautas para implantar próximos parques eólicos en territorio vasco con la premisa de que parte de la energía obtenida sea puesta a disposición de la industria, proponiéndole su entrada en los proyectos y "velando por que las fórmulas definidas respondan a sus intereses como grandes consumidores de la electricidad".
Y que otra parte de la energía obtenida sea puesta a disposición de la ciudadanía a través de un proceso de "socialización de la energía" para que "la sociedad vasca tenga un papel protagonista como futura propietaria y consumidora de los parques eólicos Itsaraz y Piaspe" con el impulso de la creación de comunidades energéticas locales (CEL) que puedan dar forma a una red ciudadana.
En conclusión, los próximos proyectos Statkraft y Krean lleven a cabo de forma conjunta tratarán de promover la socialización de la energía a través de la participación de los ciudadanos, el suministro eléctrico de kilómetro cero para la industria vasca y la colaboración público-privada. "Se inicia así una nueva etapa para los proyectos eólicos en Euskadi. Con esta iniciativa, los proyectos buscan dialogar e integrar a la sociedad para que los impactos sean los adecuados, la propiedad sea compartida y el consumo sea local", defienden.